Allá por los años 60 a lo largo de esta colina había más de media docena de parideras, apriscos, para cerrar el
ganado. En la época de
invierno las
ovejas solían pastar por el Coto Nuevo y los Cerrados del Cobacho, una zona muy abrigada y con buenas pastos donde solían parir las ovejas, cuidaban y protegían a sus crías, los corderos, de zorros y otros depredadores y rapaces...
Al fondo, a la izquierda, la Vega y el
pueblo Alcubilla de las Peñas que se confunde en el horizonte.