El
castillo de Montuenga vigilaba el paso natural entre la meseta y la
cuenca del Ebro. Su importancia la atestigua la proximidad de la calzada
romana entre Emérita (Mérida) y Caesaraugusta (
Zaragoza), que utilizaba los
valles del Jalón y el Henares para atravesar la meseta.
Cuando la la frontera de la Marca Media se desplazó hacia el sur, entró en las disputas sobre La Raya entre los reinos de Castilla y
Aragón.