El 14 de julio de 1978 fallecía en
Madrid don Gervasio Manrique. Había nacido en
Osona (
Soria) el 31 de mayo de 1891. A lo largo de su fecunda vida practicó el magisterio, el periodismo, la etnología y la literatura siendo frecuentes en su obra las referencias sorianas.
No fue la suya una vida fácil. Comprometido, como casi toda su generación, con la causa regeneracionista de la Segunda República, Gervasio Manrique fue, al término de la Guerra Civil, y pese a no haberse significado en formación política alguna, "depurado", como se decía eufemísticamente. No fue, claro, el único, la persecución contra el profesorado español fue sistemática.
Pocos días antes del alzamiento del 18 de julio la editorial Aguilar había sacado a la luz su biografía del también soriano Julián Sanz del
Río. La guerra aventaría aquellos libros, hoy inencontrables, y al final de la misma eta obra sería pieza de cargo utilizada para expedientar a nuestro personaje. Tan peligroso debía considerar la
España franquista al modesto filósofo krausista de Torrearévalo.
Hay una faceta que debió ser especialmente querida a Gervasio Manrique y fue la del folklore provincial, con especial atención a los aspectos filológicos.
Fruto de estas inquietudes irían apareciendo una serie de artículos en diversas revistas como Dialectología y
Tradiciones Populares, Celtiberia, Revista de Soria, periódicos locales, El Avisador, La Voz de Soria y nacionales como ABC y
Pueblo.
Pero también en las obras de ficción como sus "Cuentos populares" aparece con mucha frecuencia el tema de Soria, la dialectología, las leyendas y tradiciones del Alto Duero.
"Soria, la ciudad del Alto Duero", una de sus primeras obras y quizá la más entrañable, por cuanto destila un irrefenable amor a esta tierra, es también un compedio de
fiestas populares, consejas...
No es de extrañar, por tanto, que los Cuadernos de Etnología Soriana en su tercer número, que marca una nueva etapa en cuanto a formato y - esperemos - en cuanto a periodicidad, homenajée a Gervasio Manrique y reproduzca una de sus monografías más interesantes, la que subtitulada "Cultura Popular Pastoril" dedica a
San Pedro Manrique y su tierra, donde residió varios años ejerciendo su labor pedagógica.
Esperamos que este modesto reconocimiento sirva para atraer la atención de las autoridades municipales de la ciudad de Soria y éstas subsanen el olvido de no haber dedicado en su día una
calle a este soriano de recuerdo entrañable, cuando ya desde hace tiempo disfrutan de dicha distinción todos sus compañeros de generación. Soria-goig.com/Etnologia/pag_0802.htm