PEÑALCAZAR: ¿Afortunadamente? Lo afortunado sería que se rehabilitase...

¿Afortunadamente? Lo afortunado sería que se rehabilitase y se hiciera un acceso en condiciones. El que no lo conozca nadie significa que se condena a su muerte. Si nadie mantiene las casas, éstas se caen. Peñálcazar tiene posibilidades turísticas y puede restaurarse bien. Ojalá alguien se fije en la peña y pueda invertir en ello. A mí me gusta que el patrimonio no se caiga, quiero sensaciones estables, no ha cincuenta años desaparecidas.