Ante todo, no quiero que nadie se enfade por lo que voy a escribir. Solo es una opinión:
Soria es una provincia mágica, singular, y, por suerte (así piensa una habitante soriana de una de las zonas olvidadas), aún ajena al turismo "holocáustico" y exterminador de otras zonas de la provincia, como la Laguna Negra, la Fuentona o el Cañón del Lobos.
Peñalcazar es un lugar deshabitado. Ahora, ahí precisamente reside su encanto, en sus ruinas, su aire meláncolico, su soledad, su anonimato. Tengo la impresión de que bajo el nombre de "Peñalcazar ecológica" se esconde un proyecto que terminará para siempre con el encanto y la magia del lugar.
Dejad que Peñalcazar muera tranquila, disfrutadla como está, porque así nos habla de otros tiempos pasados, los cuales, ya es imposible recuperar.
Ya hay alguna aldea soriana despoblada que ha sido vendida para hacer proyectos turísticos CUTRES, artificiales, para que el turista más rancio de ciudad, pasee por sus renovadas e irreales calles.
Para habitar pueblos deshabitados, hay otras opciones. Mirad sino en Huesca, cuantas aldeas han sido recuperadas sin ánimo de lucro y sin pensar en turistas, sino simplemente para formar una comunidad y vivir.
Dejad a Peñalcazar libre, que sea el viento gélido su único morador, y sus piedras y sus ruinas las únicas que hablen.
Un saludo.
Soria es una provincia mágica, singular, y, por suerte (así piensa una habitante soriana de una de las zonas olvidadas), aún ajena al turismo "holocáustico" y exterminador de otras zonas de la provincia, como la Laguna Negra, la Fuentona o el Cañón del Lobos.
Peñalcazar es un lugar deshabitado. Ahora, ahí precisamente reside su encanto, en sus ruinas, su aire meláncolico, su soledad, su anonimato. Tengo la impresión de que bajo el nombre de "Peñalcazar ecológica" se esconde un proyecto que terminará para siempre con el encanto y la magia del lugar.
Dejad que Peñalcazar muera tranquila, disfrutadla como está, porque así nos habla de otros tiempos pasados, los cuales, ya es imposible recuperar.
Ya hay alguna aldea soriana despoblada que ha sido vendida para hacer proyectos turísticos CUTRES, artificiales, para que el turista más rancio de ciudad, pasee por sus renovadas e irreales calles.
Para habitar pueblos deshabitados, hay otras opciones. Mirad sino en Huesca, cuantas aldeas han sido recuperadas sin ánimo de lucro y sin pensar en turistas, sino simplemente para formar una comunidad y vivir.
Dejad a Peñalcazar libre, que sea el viento gélido su único morador, y sus piedras y sus ruinas las únicas que hablen.
Un saludo.
