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Proyectos de futuro
Entre los proyectos pendientes del yacimiento arqueológico se encuentra el centro de recepción de visitantes que construirá el Gobierno con cargo al PAES. Un espacio que dotará al enclave de un lugar “digno” para recibir a quienes acuden a Numancia y a su vez servirá para ofrecer una información “entretenida” sobre el yacimiento, según subrayó Jimeno.
El responsable del plan director considera “vital” este nuevo centro que puede aportar “nuevas expectativas” a la visita al yacimiento y que puede resultar un gran atractivo para el visitante.
Jimeno explicó que el proyecto está ya realizado pero pendiente de que se confirme la titularidad de los terrenos por parte del Estado de modo que se pueda continuar adelante con los trámites para su construcción.
Nuevas tecnologías
Numancia no es ajena a las nuevas tecnologías. Bajo el nombre ‘Arqueología activa en la celtiberia’, la Fundación Soriactiva de Caja Rural de Soria y las asociaciones Tierraquemada y Adir Iberkeltia trabajan en el desarrollo de una plataforma digital que permita una mayor difusión y divulgación de Numancia a través de internet.
Un museo virtual, rutas arqueológicas, recreaciones, un servicio de conexión a nternet en el propio yacimiento, para que los usuarios puedan descargar información a una PDA o a un móvil, son algunas de las ventajas que el proyecto ofrecerá a los visitantes.
Alfredo Jimeno destacó además el avance que ha supuesto la incorporación de las nuevas tecnologías en la investigación arqueológica. “Estamos manejando lo último que se puede manejar”, señaló el director.
Numancia constituye uno de los enclaves turísticos más visitados de Castilla y León. La antigua ciudad celtíbero romana vivió el pasado verano uno de los momentos álgidos de los últimos años en cuanto a visitas debido a la repercusión de exposición de Las Edades del Hombre que albergó durante más de ocho meses la concatedral de San Pedro de la capital soriana.
El responsable del plan director, el profesor Jimeno, reconoció que no será posible comparar el número de visitantes de este año con el anterior pero se mostró optimista y aseguró que Numancia “se mantiene”.
No obstante apostó por generar “elementos atractivos de continuidad” mejorando los recursos de los que ya dispone la provincia de Soria a través de “infraestructuras estables”. Advirtió que “no se puede vivir de los eventos” y reiteró la importancia de concienciarnos “en mejorar lo que ya tenemos y dotarlo de atractivo”.
Historia
Las guerras entre numantinos y romanos se prolongaron durante más de dos décadas, desde el 153 antes de Cristo hasta el 133, aunque fue el cerco de Escipión el que significó el fin para el poblamiento celtíbero en el cerro de Numancia.
Después de reiterados intentos para acabar con este enclave que se resistía al asedio, Roma envío al general Publio Cornelio Escipión en octubre del 134 antes de Cristo.
Escipión cercó Numancia disponiendo siete campamentos en los cerros próximos y controló las aguas de los dos ríos existentes a través de dos fortines.
Once meses después de la llegada del general romano, Numancia quedó derrotada y diezmando a la mitad el número de guerreros, que al inicio de las guerras celtíberas superaban los 8.000 y que se redujeron a 4.000 al final de las mismas. Muchas han sido las interpretaciones que ha hecho la historia del final de Numancia aunque la que más ha trascendido ha sido la resistencia numantina que llevó a sus soldados a preferir la muerte antes que la entrega al ejército romano. No en vano, la resistencia numantina es una referencia universal de la lucha de un pueblo por su libertad.
Entre los proyectos pendientes del yacimiento arqueológico se encuentra el centro de recepción de visitantes que construirá el Gobierno con cargo al PAES. Un espacio que dotará al enclave de un lugar “digno” para recibir a quienes acuden a Numancia y a su vez servirá para ofrecer una información “entretenida” sobre el yacimiento, según subrayó Jimeno.
El responsable del plan director considera “vital” este nuevo centro que puede aportar “nuevas expectativas” a la visita al yacimiento y que puede resultar un gran atractivo para el visitante.
Jimeno explicó que el proyecto está ya realizado pero pendiente de que se confirme la titularidad de los terrenos por parte del Estado de modo que se pueda continuar adelante con los trámites para su construcción.
Nuevas tecnologías
Numancia no es ajena a las nuevas tecnologías. Bajo el nombre ‘Arqueología activa en la celtiberia’, la Fundación Soriactiva de Caja Rural de Soria y las asociaciones Tierraquemada y Adir Iberkeltia trabajan en el desarrollo de una plataforma digital que permita una mayor difusión y divulgación de Numancia a través de internet.
Un museo virtual, rutas arqueológicas, recreaciones, un servicio de conexión a nternet en el propio yacimiento, para que los usuarios puedan descargar información a una PDA o a un móvil, son algunas de las ventajas que el proyecto ofrecerá a los visitantes.
Alfredo Jimeno destacó además el avance que ha supuesto la incorporación de las nuevas tecnologías en la investigación arqueológica. “Estamos manejando lo último que se puede manejar”, señaló el director.
Numancia constituye uno de los enclaves turísticos más visitados de Castilla y León. La antigua ciudad celtíbero romana vivió el pasado verano uno de los momentos álgidos de los últimos años en cuanto a visitas debido a la repercusión de exposición de Las Edades del Hombre que albergó durante más de ocho meses la concatedral de San Pedro de la capital soriana.
El responsable del plan director, el profesor Jimeno, reconoció que no será posible comparar el número de visitantes de este año con el anterior pero se mostró optimista y aseguró que Numancia “se mantiene”.
No obstante apostó por generar “elementos atractivos de continuidad” mejorando los recursos de los que ya dispone la provincia de Soria a través de “infraestructuras estables”. Advirtió que “no se puede vivir de los eventos” y reiteró la importancia de concienciarnos “en mejorar lo que ya tenemos y dotarlo de atractivo”.
Historia
Las guerras entre numantinos y romanos se prolongaron durante más de dos décadas, desde el 153 antes de Cristo hasta el 133, aunque fue el cerco de Escipión el que significó el fin para el poblamiento celtíbero en el cerro de Numancia.
Después de reiterados intentos para acabar con este enclave que se resistía al asedio, Roma envío al general Publio Cornelio Escipión en octubre del 134 antes de Cristo.
Escipión cercó Numancia disponiendo siete campamentos en los cerros próximos y controló las aguas de los dos ríos existentes a través de dos fortines.
Once meses después de la llegada del general romano, Numancia quedó derrotada y diezmando a la mitad el número de guerreros, que al inicio de las guerras celtíberas superaban los 8.000 y que se redujeron a 4.000 al final de las mismas. Muchas han sido las interpretaciones que ha hecho la historia del final de Numancia aunque la que más ha trascendido ha sido la resistencia numantina que llevó a sus soldados a preferir la muerte antes que la entrega al ejército romano. No en vano, la resistencia numantina es una referencia universal de la lucha de un pueblo por su libertad.