Hacienda devuelve un 7% menos que el año pasado por el aumento de las retenciones La Agencia Tributaria recuerda que este año hay menos contribuyentes con derecho a devolución
EFE
La Agencia Tributaria (AEAT) ha ingresado 9.188,84 millones de euros a 13,15 millones de contribuyentes con derecho a devolución en su declaración de la renta, un importe que es un 7,7% inferior al de un año antes y el número de beneficiarios es un 3,1% menor.
En un comunicado, la AEAT recuerda que este año, en la campaña de la renta correspondiente a 2009, hay menos contribuyentes con derecho a devolución y unos reintegros menores, ya que se aplican mayores retenciones.
Entre las previsiones de Hacienda figuraba que el importe devuelto en dicha campaña se redujera un 4,5% y su compromiso era realizar el 85% de las devoluciones antes de principios de agosto, objetivo que ha cumplido.
Durante la campaña de la Renta 2009 los contribuyentes presentaron 19,22 millones de declaraciones del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), de las que 15,31 millones solicitaron devolución. A través de Internet se presentaron casi el 39% de las declaraciones, exactamente 7,48 millones, el 8,2% más que un año antes.
Por su parte, Hacienda atendió 8,56 millones de llamadas de información, una media de 100.000 diarias, incluidas en fin de semana, y 2,16 millones de citas acordadas.
En esta campaña, la Agencia Tributaria remitió también un 4,5% más de borradores y datos fiscales a 21,58 millones de contribuyentes, aunque la cifra de declarantes es menor porque algunos presentan su renta de forma conjunta o ni siquiera tienen obligación de hacerlo por sus ingresos.
En España están obligadas a declarar las personas que obtengan rentas superiores a los 22.000 euros brutos anuales como rendimientos íntegros del trabajo cuando procedan de un único pagador, o de varios pagadores, siempre que el importe percibido del segundo y restantes, por orden de cuantía, no supere los 1.500 euros anuales.
Este límite es de 11.200 euros anuales si proceden de varios pagadores y la suma percibida del segundo y restantes supera en conjunto los 1.500 euros anuales.
Asimismo, si el pagador no está obligado a retener, o si se trata de pensiones compensatorias del cónyuge o de anualidades por alimentos, salvo que procedan de los padres por decisión judicial.
También cuando los rendimientos íntegros del capital mobiliario y ganancias patrimoniales sometidas a retención o ingreso a cuenta sean superiores a 1.600 euros anuales en su conjunto.
Además, deben declarar las rentas inmobiliarias imputadas derivadas de más de un inmueble urbano no arrendado distinto de la vivienda habitual, rendimientos de Letras del Tesoro y subvenciones para la adquisición de vivienda de protección oficial o precio tasado superiores a 1.000 euros anuales en conjunto.
EFE
La Agencia Tributaria (AEAT) ha ingresado 9.188,84 millones de euros a 13,15 millones de contribuyentes con derecho a devolución en su declaración de la renta, un importe que es un 7,7% inferior al de un año antes y el número de beneficiarios es un 3,1% menor.
En un comunicado, la AEAT recuerda que este año, en la campaña de la renta correspondiente a 2009, hay menos contribuyentes con derecho a devolución y unos reintegros menores, ya que se aplican mayores retenciones.
Entre las previsiones de Hacienda figuraba que el importe devuelto en dicha campaña se redujera un 4,5% y su compromiso era realizar el 85% de las devoluciones antes de principios de agosto, objetivo que ha cumplido.
Durante la campaña de la Renta 2009 los contribuyentes presentaron 19,22 millones de declaraciones del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), de las que 15,31 millones solicitaron devolución. A través de Internet se presentaron casi el 39% de las declaraciones, exactamente 7,48 millones, el 8,2% más que un año antes.
Por su parte, Hacienda atendió 8,56 millones de llamadas de información, una media de 100.000 diarias, incluidas en fin de semana, y 2,16 millones de citas acordadas.
En esta campaña, la Agencia Tributaria remitió también un 4,5% más de borradores y datos fiscales a 21,58 millones de contribuyentes, aunque la cifra de declarantes es menor porque algunos presentan su renta de forma conjunta o ni siquiera tienen obligación de hacerlo por sus ingresos.
En España están obligadas a declarar las personas que obtengan rentas superiores a los 22.000 euros brutos anuales como rendimientos íntegros del trabajo cuando procedan de un único pagador, o de varios pagadores, siempre que el importe percibido del segundo y restantes, por orden de cuantía, no supere los 1.500 euros anuales.
Este límite es de 11.200 euros anuales si proceden de varios pagadores y la suma percibida del segundo y restantes supera en conjunto los 1.500 euros anuales.
Asimismo, si el pagador no está obligado a retener, o si se trata de pensiones compensatorias del cónyuge o de anualidades por alimentos, salvo que procedan de los padres por decisión judicial.
También cuando los rendimientos íntegros del capital mobiliario y ganancias patrimoniales sometidas a retención o ingreso a cuenta sean superiores a 1.600 euros anuales en su conjunto.
Además, deben declarar las rentas inmobiliarias imputadas derivadas de más de un inmueble urbano no arrendado distinto de la vivienda habitual, rendimientos de Letras del Tesoro y subvenciones para la adquisición de vivienda de protección oficial o precio tasado superiores a 1.000 euros anuales en conjunto.
El precio del combustible obliga a tomar medidas a casi la mitad de las
Más de la mitad de las empresas han tomado conciencia de la importancia de los gastos de movilidad de sus empleados y están tomando medidas para reducirlos.
Después de un año en que tanto el gasóleo como la gasolina han aumentado su precio en torno a un 20%, alcanzando máxi¬mos históricos, las empre¬sas españolas se están viendo obligadas a reac¬cionar, y el 47% de ellas está implantando medidas para reducir el consumo de carburante y optimizar los gastos de movilidad de sus empleados.
Los datos proceden de El Observador del Vehícu¬lo de Empresa (CVO), que promueve Arval, la com¬pañía de renting integra¬da en el grupo BNP Pari¬bas. El capítulo de flotas es, según CVO, uno de los más gravosos para una empresa. La partida de combustible representa en estos momentos cerca del 30% del coste total de la flota de una compañía, algo que las grandes cor¬poraciones han asumido más rápidamente que las pymes estableciendo medidas de ahorro.
El sistema de control más habitual entre las empresas españolas, por el que ha optado el 43% de ellas, es la tarjeta de pago (de combustible) para sus empleados, que limita el gasto de peajes y reposta¬je a unas cantidades deter¬minadas. La siguiente medida con mayor acepta¬ción sería el control sobre las emisiones de CO2, ya que un 41% de las compa¬ñías de nuestro país con¬trata la elaboración de informes sobre el dióxido de carbono que emiten sus vehículos al considerar que un nivel excesivo puede reflejar un estado anormal del vehículo.
Otros métodos serían la incorporación de los siste¬mas de navegación para optimizar las rutas (38%), el seguimiento de la forma de conducir de los emplea¬dos para corregir conduc¬tas inadecuadas que gene¬ren más gastos (33%), y finalmente, la transmisión de la información de a bordo por parte del propio usuario (28%), que refleja un mayor grado de con¬fianza en el trabajador
Más de la mitad de las empresas han tomado conciencia de la importancia de los gastos de movilidad de sus empleados y están tomando medidas para reducirlos.
Después de un año en que tanto el gasóleo como la gasolina han aumentado su precio en torno a un 20%, alcanzando máxi¬mos históricos, las empre¬sas españolas se están viendo obligadas a reac¬cionar, y el 47% de ellas está implantando medidas para reducir el consumo de carburante y optimizar los gastos de movilidad de sus empleados.
Los datos proceden de El Observador del Vehícu¬lo de Empresa (CVO), que promueve Arval, la com¬pañía de renting integra¬da en el grupo BNP Pari¬bas. El capítulo de flotas es, según CVO, uno de los más gravosos para una empresa. La partida de combustible representa en estos momentos cerca del 30% del coste total de la flota de una compañía, algo que las grandes cor¬poraciones han asumido más rápidamente que las pymes estableciendo medidas de ahorro.
El sistema de control más habitual entre las empresas españolas, por el que ha optado el 43% de ellas, es la tarjeta de pago (de combustible) para sus empleados, que limita el gasto de peajes y reposta¬je a unas cantidades deter¬minadas. La siguiente medida con mayor acepta¬ción sería el control sobre las emisiones de CO2, ya que un 41% de las compa¬ñías de nuestro país con¬trata la elaboración de informes sobre el dióxido de carbono que emiten sus vehículos al considerar que un nivel excesivo puede reflejar un estado anormal del vehículo.
Otros métodos serían la incorporación de los siste¬mas de navegación para optimizar las rutas (38%), el seguimiento de la forma de conducir de los emplea¬dos para corregir conduc¬tas inadecuadas que gene¬ren más gastos (33%), y finalmente, la transmisión de la información de a bordo por parte del propio usuario (28%), que refleja un mayor grado de con¬fianza en el trabajador