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EN UNA TARDE ENCANTADA
Vivir la tarde sin prisa
por las orillas del Duero,
esperé por ver la brisa
de Soria y su ROMANCERO.
Recorriendo los lugares
de aquel entorno del cielo,
sin entender de cantares
sentí lograr un consuelo.
Desde El Parador pensando
en su paisaje de esmero,
por el Mirón fui logrando
ver ambiente placentero.
Aquella tarde encantada
donde vi brillar el Duero,
sentí la vida anhelada
si te dicen un te quiero.
Pisar alegre El Collado
como buen aventurero,
sin ver tu camino anclado
en un rumbo pasajero.
Aquella tarde encantada
supe gozar junto al Duero,
al ver la noche soñada
que era de amor verdadero.
Entre pasiones buscadas
y los preciosos senderos,
vives tardes evocadas
en estos tiempos austeros.
El Duero marcha tranquilo
sin lanzar jamás lamentos,
sobre su cauce perfilo
muchos grandes sentimientos.
G X Cantalapiedra.
Vivir la tarde sin prisa
por las orillas del Duero,
esperé por ver la brisa
de Soria y su ROMANCERO.
Recorriendo los lugares
de aquel entorno del cielo,
sin entender de cantares
sentí lograr un consuelo.
Desde El Parador pensando
en su paisaje de esmero,
por el Mirón fui logrando
ver ambiente placentero.
Aquella tarde encantada
donde vi brillar el Duero,
sentí la vida anhelada
si te dicen un te quiero.
Pisar alegre El Collado
como buen aventurero,
sin ver tu camino anclado
en un rumbo pasajero.
Aquella tarde encantada
supe gozar junto al Duero,
al ver la noche soñada
que era de amor verdadero.
Entre pasiones buscadas
y los preciosos senderos,
vives tardes evocadas
en estos tiempos austeros.
El Duero marcha tranquilo
sin lanzar jamás lamentos,
sobre su cauce perfilo
muchos grandes sentimientos.
G X Cantalapiedra.