Si miramos hacía la Calzada, vemos una gran mole rocosa que llamamos La Peñara, de porte imponente y majestuoso, donde de niños todos hemos jugado y escuchado las historias que los abuelos contaban, estas son sus leyendas e historias.
Dice la leyenda que La Peñara estaba habitada por árabes, que a su izquierda al otro lado hay otra formación rocosa, llamada el Horno o panadería, donde estos cocían el pan.
También cuentan que la cueva era muy larga, profunda y con simas, no como ahora que está bloqueada la entrada por desprendimientos, si no que, se podría discurrir por la cueva y hasta entraba el ganado y que los propios pastores cerraron la entrada para que el ganado no se perdiera en su interior.
También se cuenta que en esta cueva o en sus alrededores los árabes escondieron un gran tesoro cuando salieron de Calatañazor, entre otras cosas un juego de bolos de oro macizo.
Dice la leyenda que La Peñara estaba habitada por árabes, que a su izquierda al otro lado hay otra formación rocosa, llamada el Horno o panadería, donde estos cocían el pan.
También cuentan que la cueva era muy larga, profunda y con simas, no como ahora que está bloqueada la entrada por desprendimientos, si no que, se podría discurrir por la cueva y hasta entraba el ganado y que los propios pastores cerraron la entrada para que el ganado no se perdiera en su interior.
También se cuenta que en esta cueva o en sus alrededores los árabes escondieron un gran tesoro cuando salieron de Calatañazor, entre otras cosas un juego de bolos de oro macizo.