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ADALIA (Valladolid)

Jacinto
Foto enviada por Paquito

LAS EDADES DEL HOMBRE

Después de ver “Las edades del Hombre” en el histórico monasterio benedictino de Oña, en el cual cumple la decimoséptima edición, me hace reflexionar viéndolo ya con cierta perspectiva en el tiempo. Muchos años transcurridos de exposiciones tan interesantes, en la que nos hemos ido haciendo mayores, pero con muy buenos recuerdos de este maravilloso proyecto.
Posiblemente la edad y el tiempo termina haciendo mella en el ánimo humano y, el espíritu ya no sopla igual que antes ... (ver texto completo)
MÁS ALLÁ DE LA PANTALLA

Desde que los hermanos Lumiére, motivados quizá por el Kinetógrafo de Dickson, vieron las primeras imágenes en movimiento hace más de un siglo, no ha dejado de desarrollarse esta industria, convirtiéndose en la cultura de la imagen. La técnica del cine se fue perfeccionando hasta conseguir que una diminuta cámara de bolsillo pueda hacer recrear la imaginación de cualquier aficionado.
Pero refiriéndome al séptimo arte, donde en la pantalla se hacen coincidir imagen, sonido ... (ver texto completo)
MÁS ALLÁ DEL PARAISO PERDIDO

Si queremos volver al territorio de nuestra infancia, ante la incertidumbre de seguir creciendo por la senda social tan baldía, la inevitable decepción que supone la ausencia del paraíso perdido en nuestro mundo, seguro que el sentido común nos llevará a la feliz conclusión de que los paraísos no están fuera, sino más bien dentro de uno mismo.
Por lo que intuyo tendríamos que cambiar el pesimismo por el optimismo, ahora en estos tiempos de crisis, mejor dicho de ... (ver texto completo)
MÁS ALLÁ DEL ARCO IRIS

Según dice Jorge Luís Borges “El peor de los pecados es no haber sido feliz” Y, el diccionario define a la felicidad como “Un estado de ánimo que se complace en la posesión del bien”. Pensando que no deja de formar parte de nuestra búsqueda en la vida, tiene que ver mucho más con los sueños, que con la coherencia diaria. La felicidad tiene que ver más con la posesión de otra clase de bien algo más espiritual que material. Álex Rovira Celma dice que “la felicidad es una sensación ... (ver texto completo)
EN TIERRA DE ISRAEL

Antes de nacer estuve por Tierra Santa, allá en Oriente Medio donde otro Jesús como yo nació y murió crucificado, hace más de dos mil años.
Yo me veía mentalmente entre nubes de armiño, con alma de una criatura que desea nacer para vivir con amor. Me pude sentir con alas de mariposa por la orilla del mar muerto y, por la ventanilla de una frágil avioneta por el desierto de Judea, sobrevolando Masada, la montaña fortaleza, donde se produjo un suicidio colectivo ante un asedio ... (ver texto completo)
MÁS ALLÁ DEL ESPECTÁCULO

Al fin el tiempo nos da a todos la razón. Tengo que dar mi más sincera enhorabuena a todos los componentes del Teatro Real que han hecho posible la representación de este maravilloso montaje de C (h) oeurs. (Coros/Corazones).
Va más allá de un espectáculo de música y danza. Algo que no se suele ver en nuestro país. Para mí es el latido de un corazón sangrante, que pone un nudo en la garganta, no sólo por la música, magníficamente escogida, como no podía ser de otra forma, ... (ver texto completo)
EL HECHIZO (Jacinto Herreras Martín)

Si la muerte es un sueño interminable, la vida, tendría que ser un interminable sueño de amor e ilusión infantil, es decir, lo contrario de lo que suele ocurrir. Nuestro afán sería estar dentro de un cuento de hadas, y poder ir reconduciendo el espíritu hacia la belleza de este mundo.
Estaba yo releyendo un libro de Francisco Umbral “Mortal y rosa” escrito con el fragor del dolor, de haber perdido al único hijo que tuvo. Su desdoblamiento inteligente es el sello profundo de su personalidad, como un desafío jugando con el idioma. Un canto poético a la vida en nuestro mundo interno de los sentimientos…
Pues yo que no sé bien si lo habré soñado, o es fruto de mi fantasía. Me levanté frotándome los ojos al despertar de nuevo. Había en mi mente imágenes tan vívidas como si hubiera visto una película la noche anterior. Podía ir relatándome toda esa fábula y, poder ir caminando hacia el bosque en una tarde primaveral. Poder exteriorizar todos los colores, todos los sonidos que encierra esta tierra, y pasear por la alfombra floreada de la naturaleza, entre una sinfonía de grillos y mariposas. Más bien despertar al amor y al afán poético de exteriorizar la belleza interna y, porqué no, también la externa de la naturaleza de Cantabria.
Lo de vivir dentro de un cuento de hadas, es como sentir que los sueños al fin se terminan cumpliendo, al menos cuando esperamos que ocurran milagros. Había escrito ya algo infantil en “La anjana de mis sueños”. Era como volver a intentar de nuevo poder caminar por los entresijos de la imaginación, para ir poblando espacios y sueños de animosidad.
A quién no le gusta penetrar en los vericuetos del misterio y, sintonizar con el espíritu de nuestras fantasías. La magia puede atraparte y, te lanzas a volar para encontrar el sentido de vivir acompañado de otras almas que vuelan lejos del materialismo de nuestro mundo. Pero ya digo, que los sueños pueden ir habitando espacios virginales de nuestra mente.
Este ámbito de sentir el universo más cercano te da ocasión de hallar la razón y descubrir que ahí está, antes de abrir los ojos. Se dicen muchas frases bonitas, como que “todo el universo conspira en contra nuestra”. Yo pienso que es todo lo contrario, todo está en armonía, hasta que lo integramos con el tiempo. “Envejecer es el único medio de vivir mucho tiempo, porque la madurez del hombre es haber vuelto a encontrar la serenidad, con la que jugábamos cuando éramos niños”.
Los duendes corren más deprisa que la imaginación y, a veces, te sorprenden al soñar despiertos, y ver que hay almas gemelas que revolotean en el corazón del bosque. Sólo hay que abrir los ojos… ¡Allí estamos, rodeados de brujas y duendes, con el afán de encerrarnos…en la “cabaña del diablo”!. A las malas hadas, hay que mirarlas hacerlas sonreír si es preciso, para que se apiadan de nosotros.
- ¿No te compadeces de nosotros…? - Las preguntamos.
- No, las lágrimas son recursos humanos, -contestaron claramente.
- Y la sonrisa…?
- La sonrisa es un subterfugio muy explotado.
- Pues seguiremos llorando,-dijimos.
- Y… ¿quién se merece vuestros lloros?. -Dijeron carcajeándose.
- Quien se lo merezca, nunca llorará por vosotros. –en tono maligno…
- No perdáis el tiempo con quien no quiera que no le importéis.
Todo esto ocurría mientras nos empujaban dentro de la cabaña. Los reflejos de la luz se iban desdibujando por la oscuridad del bosque. Aunque no era la noche cerrada, apenas quedaban puntos de luz donde poder fijar la mirada. Sólo se percibían unos puntitos luminosos, como cerillas que se iban encendiendo y apagando a escasos metros de la cabaña. Pronto empezó todo a arder, muy cerca de la puerta, donde habían tapado con ramajes…
- Pero, qué intentáis, ¡¿quemarnos…?! ¬- las preguntamos -
- No, sólo es para purificar vuestros cuerpos…- respondían gritando-
- Ja, ja, ja, nos reímos de vosotras, brujas endemoniadas.
- Pues no os rías tanto, porque vais a arder en nuestro infierno.
- Pero si no tenemos cuerpos, malditas brujas y, no podéis quemarnos…
De pronto empezó a llover, el sonido de las gotas de agua sobre las ramas, eran como una canción de cuna. Nos sentíamos de golpe con una paz interna inusual.
Mientras que yo recordaba que antes, había escrito algo sobre los duendecillos, algo sobre una anjana en un bosque de Cantabria. Ahora dentro de una cabaña rodeados de brujas, diablillos etc. Era como verlos a todos internamente en un sueño, de dentro a fuera, antes de que salgan, que abran su puerta para meternos miedo a los humanos. Las veíamos tan cercanas que podíamos hablar con ellas…
- Brujillas, ¿por qué a nosotros no nos dais miedo…?
- El miedo es libre, damos miedo al que ya lo tiene. -decían susurrando-
- El miedo sólo es una sombra, un estado de incertidumbre, claro.
- Y tu diablillo, porque nos has querido quemar vivos…?
- Es que la incertidumbre del mal, también es una sombra y, nosotros nos divertimos mucho con la maldad. Haceros rabiar y que os muráis de miedo.
- Vuestro poder es muy limitado, desaparece con la luz, dais miedo sólo cuando hay oscuridad si nos encerramos en el interior.
- Y… vosotros, duendecillos juguetones que hacéis por el día en el bosque…?
- Nosotros nos divertimos mucho jugando al escondite, ya que aparecemos y desaparecemos a nuestro antojo. –decían muy risueños.
- ¿Dónde están las hadas…? – les preguntamos, muy bajito.
- Ah, las hadas, se aparecen sólo a quien ellas quieren. –Contestaron rápido.
- Mirad, ahí tenéis un hada a la que llamamos “Virgi”, se suele ir a dar baños de olas a las playas. Nadie la puede ver, sólo cuando ella quiere. –dijeron-
Era el hada que yo había visto reflejada en los ojos de una adolescente… -Lo pensaba al irme despertando-. La mirada es un reflejo en el espejo de la mente, un cuarto oscuro con un rayo de luz. Las hadas se reencuentran en el diálogo interno de nuestros sueños. Además tienen la habilidad de volar o nadar; depende de la disponibilidad de nuestra mente y, de lo que esperemos de ellas…
Varias semanas después, casi había olvidado el sueño que habitó en mi mente. Llegó la primavera y, llegaron las flores inundándolo todo de luz y color. ¡Esta primavera intentaré ser feliz…! Era el propósito de todos los años, pero la ruidosa ciudad nos comprime cada día más y, la felicidad no termina de instalarse bien.
A veces en la oscuridad vuelan espíritus inimaginables, se libran batallas con fuerzas antagónicas, pero al momento lo desvanece la imaginación.
Después de una larga noche de sueños y pesadillas, me despertó un gran día de sol, los rayos intensos se filtraban por la ventana, iluminando el libro de Umbral sobre la mesilla de noche. Que buen día para ir al campo –pensé- y sin bacilar, con un día tan resplandeciente me cogí un bocata y el coche y me fui al campo.
Cuando regresé al bosque ya no encontré nada de los sueños, sólo una mariposa revoloteando. Ah!, y una lagartija que me miraba un poco asombrada, como si viera a un gigante. Me quedé mirando la escena en medio del silencio entre los ramajes. La mariposa se posó muy cerca de la lagartija y, esta, parecía que la iba a comer, pero al instante ambas desaparecieron, como los sueños, que al final se terminan pareciendo como un reflejo de la vida. ... (ver texto completo)
MÁS ALLÁ DE LOS ÁRBOLES DEL BOSQUE

Uno de momentos sublimes en nuestra vida es tener un hijo, quizá también pueda serlo escribir un libro, pero sin duda uno de los más mágicos y transcendentes para la humanidad sea la de plantar árboles. Ahora recuerdo que de jóvenes, repoblábamos los montes de pinos en Castilla.
Los árboles siempre nos marcan el camino, el destino de permanencia y, esa sensación de plantar un árbol no deja de ser un rito, en el que al final siempre le cantábamos algo así como ... (ver texto completo)
MÁS ALLÁ DE LAS MEIGAS

Tres libros para leer, Rilke, Delibes y Vargas Llosa en la maleta. Tres semanas por Galicia, para acompañar a Cristina, mi hija soprano y, a nuestra nieta Alba, como felices abuelos canguros.
La Camerata Lírica de España, hace asequible a los niños de siete a diez años, un bonito divertimento “Humor en la Ópera” representado con acierto.
En Lugo, la vieja ciudad ceñida por su muralla con la catedral, que expone su verdoso color, como anticipo metafórico del romanticismo ... (ver texto completo)
MÁS ALLÁ DEL CARNAVAL

Intentaba salirme este año de la escena, para ver la comedia social, con prismáticos en estos carnavales. Salí a curiosear y al momento pasaba Blancanieves con los enanitos, Caperucita y el lobo. Toreros, reinas y obispos, entre un montón de piratas…
Me encontré con un amigo al que ya hacía mucho que no veía. Me comentó que estaba metido en el ruedo político, que había pasado por unas cuantas siglas de partidos políticos y, que estaba un poco decepcionado porque no se había ... (ver texto completo)
MÁS ALLÁ DE LA LIBERTAD

(Regala tus palabras. Amnistía Internacional)

No es fácil ser libre. La auténtica libertad no la vive quien quiere si no quien puede, si distinguimos bien las condiciones de cautividad, en esta sociedad que nos toca vivir de normas y esclavitudes un tanto surrealistas. Servilismos y leyes que a veces impiden respirar bien y, ejercer los anhelos humanos, tantas veces soñados.
El complicado engranaje de caminar por esta vida, nos hace arrastrar los pies atollados por un pegajoso barro consumista, yendo a trompicones llenos de aparatos ortopédicos hacia ningún sitio. Sólo nos queda el espíritu soñador que te haga volar alto -como lo hacia Miguel Hernández en su prisión – Para que sean los poetas los que tengan la última palabra…Quizá vivamos atados a un sistema que hasta el olor de las flores ha sido robado y, tengamos que comprarlo en un frasco impregnado de sonrisas y falsas promesas de felicidad.
Las injusticias, los dramas, las delincuencia etc… son distintos aspectos de una misma cuestión, no hay más que elevar un poco la mirada, o la escala de valores, (si aún quedan). No hace falta una lupa para ver la causa y el efecto de las conductas humanas en todos los aspectos de la vida. Ver como nos peleamos por hacernos con dinero fácil o por encontrar la seguridad del bienestar, como si de un seguro de vida se tratara para obtener el placer por el placer. Hoy día se habla, se filma, se guarda se vende o se compra; se envidia, se perdona o se condena y, se mira uno las manos para saber si de verdad están libres. Todos somos un poco cómplices de hacer o consentir que se hagan locuras en este mundo tan surrealista. A lo mejor esta a punto de explotar en nuestras manos tanta falsedad, como una bomba de relojería…
Difícilmente podremos quitarnos del medio a los pobres, cada vez más pobres, y a los ricos, cada vez más miserables en este mundo de los derechos humanos. No hay ley ciudadana que pueda tapar con una venda el cáncer social. ¿Cómo puede haber orden público sin bien común…? Y, eso tiene unas raíces más allá del código penal.
En una democracia que defender razones morales y de justicia, hasta las últimas consecuencias, te puede conducir a la cárcel, es una sociedad enfermiza.
No es un tópico, repetir el sentido de pobreza desmedida. El espíritu de tantos millones de pobres, que sólo tienen dinero, aunque le lleve a ser los más ricos del cementerio.
La verdadera libertad es un don que muy pocos tienen la suerte de vivir, sólo los que tiran a tiempo las muletas, para tener una mente clara, para llenarte de algo mas de contenido en el corazón. La libertad auténtica no le encierra ninguna reja, el espíritu puede volar por todo el universo, hasta hacer realidad el sueño. Aunque esto parezca muy poético, la verdad es que nuestra sociedad camina a ciegas, reprimiendo todo lo que es incapaz de vivir por comodidad y cobardía. Por eso se inventaron las prisiones, allí no se puede construir más que sueños entre miserias humanas a golpe de cerrojos, pero aún así hay quien puede meter al mundo en su celda para despreciarle, más allá de la libertad.

Jacinto Herreras Martín ... (ver texto completo)
LA FAMILIA HERRERAS

Cuando en 1980 celebramos las bodas de oro de los abuelos, ya fue un acontecimiento familiar numeroso y emotivo. ¡Si ellos lo vieran ahora!. A ese viejo tronco del árbol entre Jacinto y Catalina en Adalia, le fueron creciendo las ramas y, ahora ya somos ciento seis. Hoy, cinco de diciembre del 2010 en el parador de Tordesillas, estamos una mayoría, con los hijos de sus hijos y, los hijos de sus nietos, más la otra abundante generación de niños que seguirá prolongándose…
Oímos ... (ver texto completo)
FELICIDADES A TODOS
Ahora que vamos hacer nosotros, los descendientes de ADALIA una reunión familiar el próximo domingo, día cinco de diciembre en el parador de Tordesillas. La familia Herreras, que ha ido creciendo, hasta llegar de momento a 106 miembros, ya podéis ver, vamos creciendo como la mala hierba... ¿Si nos vieran ahora mis padres…?.
Les quiero poner un sencillo verso que yo le hice cuando cumplió mi padre 90 años y, esto que es muy común, porque cualquiera del pueblo lo hubiera hecho ... (ver texto completo)
MEMORIA SENTIMENTAL, (DE LOS RANEROS)

ADALIA EN EL RECUERDO

Recordando los años cincuenta, por aquellas tierras de labranza, con tantas familias numerosas, sería como poder hacer una película en el cuarto oscuro de nuestro pensamiento.
Pero ahora quiero ir recordando los matrimonios, a todos los que componíamos el pueblo, recordarles es volver a vivir. Entrañables vecinos de ADALIA de aquellos tiempos lejanos… Yo creo que muchos descendientes y familiares, cuando lo lean lo irán recomponiendo ... (ver texto completo)
TARJETA INTERNA

Soy un Jacinto entre flores
de amigos, conquistador
procuro ir caminando
y, enamorar al amor.

No me esclaviza el dinero
soñador, muy singular
valoro más las estrellas, ... (ver texto completo)