En primer lugar, el victimismo no es lo mío. La estrategia del avestruz, tampoco; me gusta más resolver los problemas, no esperar ridículamente a que algún hado misterioso los solucione. El tiempo no resuelve, a menudo enquista y empeora, que es justo lo que está pasando. Y ya que, con un alarde de pobreza moral me atacas a nivel personal, te diré que agua pasada no mueve molinos. Puede que no tengo un largo pasado en este pueblo, o que no tenga ocho apellidos castellanos, pero tengo un presente ... (ver texto completo)