Hoy he visitado la
Feria Internacional de Muestras en su setentaicinco aniversario y quiero compartir con vosotros lo que he sentido.
En primer lugar, una tremenda decepción pues se ha convertido en un
mercadillo, eso si, grande pero mercadillo.
Con la disculpa del setentaicinco aniversario, la entrada es gratuita, con lo que significa masificación por todo lo alto, y
familias enteras a pasar el día.
Claro que con esto de la crisis económica, si cobran algo, no va nadie.
En segundo lugar he sentido
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