La virgen hilaba,
la dueña dormía,
la rueca giraba
loca de alegría.
¡Cordero divino,
tus blancos vellones
no igualan al lino
de mis ilusiones!
... (ver texto completo)
la dueña dormía,
la rueca giraba
loca de alegría.
¡Cordero divino,
tus blancos vellones
no igualan al lino
de mis ilusiones!
... (ver texto completo)
muy madrugador extramuros con tus preciosas poesias a si que yo tambien
muy madrugadora en darte las gracias a lo mejor te da tiempo a escribir otra
un saludo y hasta pronto
muy madrugadora en darte las gracias a lo mejor te da tiempo a escribir otra
un saludo y hasta pronto