En cuanto Dios, morir fuera locura.
En cuanto hombre y Dios, procuraría
no pensar, pues jamás comprendería
un misterio tan lleno de amargura.
La fe me salve, soy tu criatura;
pues un mortal tampoco entendería
esa muerte surgiendo al tercer día,
ese yacer en una sepultura.... Ya le han puesto los hermanos de " la soledad " en el regazo de su madre.