Aquí en este pueblo no hay ninguna ley del silencio. Quienes lo sepan ya lo dirán en su momento, espera, no seas impulsivo. Cuando esta fotografía en realidad no se estaba haciendo el museo del calzado, se estaba haciendo la policlínica, y la vivienda al médico en el primer piso.
Eso fue en principio el uso que se iba a dar a este edificio.
Posteriormente, al no venir el médico a vivir a Cuenca, fué cuando en uno de los salones de la primera planta, mirando al sur, se establecíó el museo del calzado de Julio Vibot. Al desaparecer (no se el motivo, pero parece ser por desavenencias," eso dicen" ¿con quien? no lo sé)...