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CUENCA DE CAMPOS: Estrella errante: Querido amigo, me entristece verte...

Me gustaría saber su historia, por el aspecto de la casa y su construcción tiene que ser interesantísima. Gracias.
TU

Hola:
Yo tambien estoy muy interesado en saber lo más posible de esta casa, la cual habito desde hace unos años.
Por lo que ruego a toda persona de bien que quiera informarme sin otras pretensiones que adelante.
Gracias a todos
Fermin

Aquí está la segunda parte de la historia de esta Gran Casa que no "casa grande":

Por azares del destino en el pasado Siglo-XX y como consecuencia de las injusticias que la posguerra trajo, la Señora Doña Carmen Tejero Álvarez Crespo Fernandez, sobrina-abuela de Doña Dolores Fernandez Villelga y Señora entonces de esa Casa, fue acogida en esta casa por ella.

Posteriormente se casó con Don Bernabé Martinez Tejero (primo-segundo por parte de su Padre: Aurelio Tejero, por eso sus hijos llevan honrosamente los mismos apellidos que su padre cuyo nombre tambien coincide con el su padre D. Bernabé Martinez Tejero), tuviero 7 hijos que nacieron todos en esta Casa y en la misma habitación y en la misma cama, ¿quien necesitaba Hospitales ni epidurales? Don Pablo el Barbero-Peluquero y Practicante se encargaba de todo lo sanitario en los partos.

También por paradojas injustas del destino ó para ser más exacto, por el egoísmo y materialismo, que no respeta ni los "sagrados vínculos" familiares y/ó afectivos, esta casa, después de haber sido saqueada y expoliada por los que la debían todo, ahora pertenece a unos dueños que nada tienen que ver con esta Familia y que sin embargo respetan mucho, pero que mucho más, su historia y la de la Familia que la habitó, que sus techos vieron nacer y crecer durante los últimos más de 50 años.

Hay otros ejemplos similares en este Pueblo, pero creo que esta casa es ahora el "Santa Sanctórum", de hasta dónde pueden llegar el materialismo, el orgullo y egoísmo, así como otros malos ismos humanos, que destruyen vínculos familiares con tanta historia y experiencias familiares vividas, que deberían mantenerse inalterables y ganando en solidez de generación en generación. Pero vivimos actualmente en un Mundo más materialista que nunca y por esta causa, cuando una casa la heredan varios hermanos, acaba como acabó también “la casa grande” del padre de Don Bernabé Martínez Tejero Don Bernabe Martinez.

Si quieres saber mucho más de esta Gran Casa y su historia y la de los que la moraron, te sugiero consultes con Aderito Pérez, él precisamente vive en una casa que fue de un antepasado Indiano de esta, él es el que más sabe después de mí y de Arsenio Martínez Tejero q. e. p. d, desgraciadamente él ya no puede contar nada y ha sido también injustamente olvidado por su pueblo y por su propia Familia.

Estrella errante: Querido amigo, me entristece verte triste, y bien sabes que te lo digo de corazón, es muy triste que por ciertas circunstancias de la vida, todo nuestro pasado salte hecho añicos, y lo que más queríamos, parte de nuestra identidad, y nuestras raíces desaparezcan, o no las encontremos por ninguna parte.
Tienes toda la razón, que este fue tu hogar, donde os criasteis los siete hermanos.
En los últimos tiempos yo traspasaba el umbral de esta vuestra casa, para saludar a tus padres, o bien charlar con tus hermanos y en especial con tu hermano Arsenio Q. E. D, que para mi, era una persona muy culta y bien informada, conocía muy bien la vida de nuestro pueblo y la de nuestro patrón San Bernardino.
Recuerdo una frase de tu madre que me dijo a raíz del fallecimiento de tu hermano “Raúl es muy duro perder a un hijo”.
Es muy difícil olvidar a las personas, los edificios, y hogares, donde siempre encontramos cariño o amigos que te ofrecían su amistad.
Por una razón o por otra, todos, amigos, gente querida y conocida, nos hemos ido diseminando a través de la geografía española en diversos lugares.
Ahora procuramos saludarnos, y mostrarnos mediante estos fantásticos medios de comunicación.
Solo deseo animarte y como bien dice tu primo Contreras, el pasado siempre será pasado, y con más o menos dolor no deja de ser historia.
¡Animo querido amigo! Este año tendremos que vernos y celebrar las fiestas de San Bernardino.
¿Verdad que sí?
Tú sabes, que somos muchos los que te apreciamos
Recibe un fuerte abrazo.