ASI ES MI TIERRA
Hay paisajes que son idóneos para caminar. Ir por pequeñas carreteras, parar el coche donde algo nos lo sugiere y ponerse a andar.
En el llano no hay lomas que subir, ni cuestas, ni casi fatiga corporal en la marcha a pié.
En la Tierra de Campos la disculpa puede ser respirar el olor del cereal seco, el color verde o amarillo del trigo.
El simple ir hasta una construcción de adobe, un árbol aislado que divisamos a lo lejos. Hay un poema cuyo comienzo dice así:
"Nunca había sabido que mi paso era distinto sobre tierra roja, que sonaba mas puramente seco lo mismo que si no llevase un hombre, de pie, en su dimensión. Por ese ruido quizá algunos linderos me recuerden".
En otro poema "A la respiración en la llanura" nos anima a dejar de respirar y que nos respire la tierra, que nos incendie en sus pulmones.
Hay paisajes que son idóneos para caminar. Ir por pequeñas carreteras, parar el coche donde algo nos lo sugiere y ponerse a andar.
En el llano no hay lomas que subir, ni cuestas, ni casi fatiga corporal en la marcha a pié.
En la Tierra de Campos la disculpa puede ser respirar el olor del cereal seco, el color verde o amarillo del trigo.
El simple ir hasta una construcción de adobe, un árbol aislado que divisamos a lo lejos. Hay un poema cuyo comienzo dice así:
"Nunca había sabido que mi paso era distinto sobre tierra roja, que sonaba mas puramente seco lo mismo que si no llevase un hombre, de pie, en su dimensión. Por ese ruido quizá algunos linderos me recuerden".
En otro poema "A la respiración en la llanura" nos anima a dejar de respirar y que nos respire la tierra, que nos incendie en sus pulmones.