OTOÑO
Lágrimas blancas, vaho en los cristales
del llanto melancólico de octubre
y un rescoldo de niebla que no encubre
ocres sedientos de hojas autumnales.
Bufandas que se van, iris astrales,
tras risas infantiles, mar salubre,
y una cigüeña en fuga que descubre
nostalgias de recuerdos estivales.
Se respiran alientos con sotana
de un domingo vulgar, de vulgar sueño,
de rocío en la voz y en la ventana.
Y aunque añoro el verano con empeño
me grita irreverente esta mañana
que es Otoño la gracia de su dueño
De un paisano
Lágrimas blancas, vaho en los cristales
del llanto melancólico de octubre
y un rescoldo de niebla que no encubre
ocres sedientos de hojas autumnales.
Bufandas que se van, iris astrales,
tras risas infantiles, mar salubre,
y una cigüeña en fuga que descubre
nostalgias de recuerdos estivales.
Se respiran alientos con sotana
de un domingo vulgar, de vulgar sueño,
de rocío en la voz y en la ventana.
Y aunque añoro el verano con empeño
me grita irreverente esta mañana
que es Otoño la gracia de su dueño
De un paisano