No se de donde sacas todas estas fotos amigo Joaquín, pero he de reconocer que son muy buenas. Como posada, no se si la llegue a conocer, pero si recuerdo que en ella se hospedaban los últimos años de vida de la señora Petra, los primeros segadores que venían a Cuenca con sus cosechadoras desde Albacete.
Un abrazo
Un abrazo