MIRANDO LAS FOTOGRafías del foro, he encontrado dos títulos, el de MAESTRA de mi tía JUANITA, y también el de "otro GRAN MAESTRO", como fué en su trabajo, mi tio TEODORO, Y LES FALTA UN TERCERO EL DE GRANDES PERSONAS.
Todos los que tuvimos la suerte de compartir parte de nuestra vida con ellos, estamos muy orgullosos.
Un abrazo
Todos los que tuvimos la suerte de compartir parte de nuestra vida con ellos, estamos muy orgullosos.
Un abrazo
Hola, amigo Contreras:
Aunque ya han pasado algunos meses que pusiste esta foto correspondiente a una factura de tu abuelo Teodoro escrita además de su puñu y letra y que por eso tiene todavía más valor, y en la que figura el nombre suyo, y el de los tres peones.
Quienes tengais la fortuna de disponer de ese documento deberíais de conservarlo como hasta ahora, puesto que es una joya conservar ese tipo de documentos tan antíguos. Cuando lo ví, me hizo mucha ilusión porque me recordaba sobre todo, mi adolescéncia, pues aunque la factura no tiene fecha pero rondaría el año 1.955-56, es decir; yo era un pollito con 14 u 15 añitos, casi nada.
Y ahora sin más preámbulos paso a redactaros el porqué yo, ganaba 20 pesetas diarias y los otros dos 18.
En aquellos tiempos de los años 50, al menos por nuestra comarca pucelana, los contratos eran verbales; como éramos todavía menores de edad, se ponía en contacto el maestro con los padres del zagal en cuestión, y a partír de ahí, pertenecías a la empresa en condición de peón fijo; ese era mi caso, y el de los otros dos zagales, Teódulo, alias "coruja", hijo de Gerardo y María Luisa, y el otro peón, hijo de Mariano, alias "foravilla", no me acuerdo quien sería de ellos, podía ser Patrocínio, alias "calores" llamado familiarmente tambien Patiño, diminutivo de Patrocínio, por ser el más cercano a mi edad.
Estos dos peones ganaban menos que yo pero, no creo que fuera por que rindieran menos, sino porque se les contrataba como temporeros; es decir, por meses, semanas, o incluso días, cuando el trabajo apretaba, que era bastante, a menudo por fortuna, ya que tu abuelo como ya se ha dicho, era un buen maestro de obras como él mismo se denomina en la factura.
Si me dejo algún hilo suelto, te lo puede confirmar tu tío Tasio, que tambien le tocó participar esporádicamente en el trabajo, de su padre, sobre todo, pintar, y decorar.
De momento, nada más, creo que con esta extensa información, habrás quedado ya satisfecho de toda esta historia que yo te he relatado con todo cariño, puesto que me afectaba directamente.
Me alegro mucho de que haya personas, o famílias como la vuestra que conserven como se suele decír (como oro en paño) cierto tipo de documentos tan valiosos para la família, y abyacentes, como en este caso.
Recibe un afectuoso saludo, y.... hasta pronto, (espero), amigo.
Aunque ya han pasado algunos meses que pusiste esta foto correspondiente a una factura de tu abuelo Teodoro escrita además de su puñu y letra y que por eso tiene todavía más valor, y en la que figura el nombre suyo, y el de los tres peones.
Quienes tengais la fortuna de disponer de ese documento deberíais de conservarlo como hasta ahora, puesto que es una joya conservar ese tipo de documentos tan antíguos. Cuando lo ví, me hizo mucha ilusión porque me recordaba sobre todo, mi adolescéncia, pues aunque la factura no tiene fecha pero rondaría el año 1.955-56, es decir; yo era un pollito con 14 u 15 añitos, casi nada.
Y ahora sin más preámbulos paso a redactaros el porqué yo, ganaba 20 pesetas diarias y los otros dos 18.
En aquellos tiempos de los años 50, al menos por nuestra comarca pucelana, los contratos eran verbales; como éramos todavía menores de edad, se ponía en contacto el maestro con los padres del zagal en cuestión, y a partír de ahí, pertenecías a la empresa en condición de peón fijo; ese era mi caso, y el de los otros dos zagales, Teódulo, alias "coruja", hijo de Gerardo y María Luisa, y el otro peón, hijo de Mariano, alias "foravilla", no me acuerdo quien sería de ellos, podía ser Patrocínio, alias "calores" llamado familiarmente tambien Patiño, diminutivo de Patrocínio, por ser el más cercano a mi edad.
Estos dos peones ganaban menos que yo pero, no creo que fuera por que rindieran menos, sino porque se les contrataba como temporeros; es decir, por meses, semanas, o incluso días, cuando el trabajo apretaba, que era bastante, a menudo por fortuna, ya que tu abuelo como ya se ha dicho, era un buen maestro de obras como él mismo se denomina en la factura.
Si me dejo algún hilo suelto, te lo puede confirmar tu tío Tasio, que tambien le tocó participar esporádicamente en el trabajo, de su padre, sobre todo, pintar, y decorar.
De momento, nada más, creo que con esta extensa información, habrás quedado ya satisfecho de toda esta historia que yo te he relatado con todo cariño, puesto que me afectaba directamente.
Me alegro mucho de que haya personas, o famílias como la vuestra que conserven como se suele decír (como oro en paño) cierto tipo de documentos tan valiosos para la família, y abyacentes, como en este caso.
Recibe un afectuoso saludo, y.... hasta pronto, (espero), amigo.
