Ya veo que el internáuta que cuenta esto de las cuevas, es un chico, y más o menos de mi edad; yo también me acuerdo de todo eso, pues realmente nos lo pasábamos por lo general muy bién, pero algunas veces se presentaban los gamberretes de turno que eran algo mayores que nosotros, no quiero dar nombres, y una de las veces casi acabó el juego en tragédia ya que, los mencionados gamberretes aprovecharon cuándo estábamos dentro unos cuantos y como la cueva en la que estábamos, se comunicaba, cogieron no se de donde, dos montones de paja y colocaron uno en cada entrada, y los prendieron fuego, ya te puedes imaginar la humareda que se preparó dentro de la cueva; y lo más gordo, es que al intentar salir, no nos dejaban, hasta que milagrosamente pasó por allí un pastor, y evitó la tragédia echando a patadas a aquellos mal nacidos.
Aunque esta historia parezca una aventura fantástica, es cierto, e incluso hay por lo menos dos de los gamberretes que todavía viven y que algún día os diré quienes son; el pastor ya murió el hombre, y por eso os diré quien fue; pues el buen pastor nunca mejor dicho en este caso era Guillermo, apodado el escondido, que era de la família de "LOS PITANES"
Aunque esta historia parezca una aventura fantástica, es cierto, e incluso hay por lo menos dos de los gamberretes que todavía viven y que algún día os diré quienes son; el pastor ya murió el hombre, y por eso os diré quien fue; pues el buen pastor nunca mejor dicho en este caso era Guillermo, apodado el escondido, que era de la família de "LOS PITANES"