Me refiero al Señor Alcalde de CUENCA DE CAMPOS. Quiero distinguir entre la persona y el Alcalde. Admito que he sido defensor de su persona y sigo siéndolo porque como persona le aprecio, como aprecio a Toño, a Teresita y a los otros. Es un afecto ancestral que llevo dentro.
Como Alcalde me da PENA porque da la sensación que en su larga carrera de Regidor de la Villa no ha aprendido NADA.
Ha perdido aquella frescura que antaño le caracterizó y parece que ahora tiene la alcaldía para fomentar su ego; no admite segundo y se ensaña con los más débiles.
El olor al incienso de sus turiferarios le ha endiosado y este cesarismo cada día perjudica y divide más a los cuenquines.
Últimamente ha tenido dos actuaciones tan denigrantes que son paradigma de lo peor de los peores tiempos pasados.
Esto es muy peligroso y siento mucho decir que me parece que este hombre no está para ser ALCALDE.
Tendrá más actuaciones como éstas. Al tiempo.
Como Alcalde me da PENA porque da la sensación que en su larga carrera de Regidor de la Villa no ha aprendido NADA.
Ha perdido aquella frescura que antaño le caracterizó y parece que ahora tiene la alcaldía para fomentar su ego; no admite segundo y se ensaña con los más débiles.
El olor al incienso de sus turiferarios le ha endiosado y este cesarismo cada día perjudica y divide más a los cuenquines.
Últimamente ha tenido dos actuaciones tan denigrantes que son paradigma de lo peor de los peores tiempos pasados.
Esto es muy peligroso y siento mucho decir que me parece que este hombre no está para ser ALCALDE.
Tendrá más actuaciones como éstas. Al tiempo.