Luz ahora 0,11417 €/kWh

CUENCA DE CAMPOS: Recuerdo que el día que murió Manolíta, por casualidades...

Recuerdo que el día que murió Manolíta, por casualidades de la vida, me enteré a las dos horas estando como estoy fuera de Cuenca.
Lo primero que hice al llegar a casa, fué escribir en el foro los versos de Jorge Manrique dedicados a la muerte de su padre, como homenaje a esa gran mujer.
Como todos sabemos, el foro tuvo sus problemas, y desaparecieron todos los mensajes. Es por eso que hoy vuelvo a copiarlos, esperando que sirvan de recuerdo para siempre.
El 27 no podré asistir a la misa en Cuenca, pero mi recuerdo y mis oraciones, seguro que no faltaran.

Va por ti Manolíta.

Recuerde el alma dormida,
avive el seso y despierte
contemplando
cómo se pasa la vida,
cómo se viene la muerte
tan callando,
cuán presto se va el placer,
cómo, después de acordado,
da dolor;
cómo, a nuestro parecer,
cualquiera tiempo pasado
fue mejor.

Pues si vemos lo presente
cómo en un punto se es ido
y acabado,
si juzgamos sabiamente,
daremos lo no venido
por pasado.
No se engañe nadie, no,
pensando que ha de durar
lo que espera,
más que duró lo que vio
porque todo ha de pasar
por tal manera.

Nuestras vidas son los ríos
que van a dar en la mar,
que es el morir;
allí van los señoríos
derechos a se acabar
y consumir;
allí los ríos caudales,
allí los otros medianos
y más chicos,
y llegados, son iguales
los que viven por sus manos
y los ricos.

Recordar a los amigos de fuera que visitan el foro de Cuenca, que Manolíta era una gran mujer, que se desvivía por su pueblo.
Es la que aparece en la fotografía el día de su boda, recibiendo el Embargo por parte de los mozos de Cuenca.