Esta casa pertenecía a los hermanos Valdivieso, y sus nombres eran: Soledad, Guillermo, y Eufémia, los tres solteros, creo que la heredaron unos sobrinos que viven en Valladolid y suelen venir en el verano; es una gran casa.
Aunque hay gente que no está de acuerdo en que se pongan tantas fotos, detrás de cada foto, puede haber un millón de historias.
Ya que Emigrante nos ha recordado a los antiguos moradores de esta casa, quiero contar una historia que escuché de pequeño sobre Guillermo, y el motivo por el cual, le pusieron el apodo de, MALDUERME.
Según me contaron las buenas lenguas, al llegar las fiestas de San Bernardino, Guillermo quiso descansar lo suficiente para coger fuerzas y celebrarlas por todo lo alto, con lo cual, y por tener fama de dormilón, encargó a sus hermanas que lo despertaran para las vísperas.
El caso es que la cosa no salió según lo previsto y sus hermanas se olvidaron de despertarle.
Cuando Guillermo despertó, ya estaban terminando las fiestas.
Él, contaba que sus hermanas se olvidaron, ellas decían que lo hicieron queriendo.
Así me lo contaron y así os lo cuento.
Ya que Emigrante nos ha recordado a los antiguos moradores de esta casa, quiero contar una historia que escuché de pequeño sobre Guillermo, y el motivo por el cual, le pusieron el apodo de, MALDUERME.
Según me contaron las buenas lenguas, al llegar las fiestas de San Bernardino, Guillermo quiso descansar lo suficiente para coger fuerzas y celebrarlas por todo lo alto, con lo cual, y por tener fama de dormilón, encargó a sus hermanas que lo despertaran para las vísperas.
El caso es que la cosa no salió según lo previsto y sus hermanas se olvidaron de despertarle.
Cuando Guillermo despertó, ya estaban terminando las fiestas.
Él, contaba que sus hermanas se olvidaron, ellas decían que lo hicieron queriendo.
Así me lo contaron y así os lo cuento.
