Al ver la fotografía de esta monja, no puedo por menos de recordar su voz, su voz dulce, su voz que irradiaba simpatía tras el torno donde estas monjas de clausura, despachaban leche y tambien dulces.
Que recuerdos más gratos tengo del convento, donde oia la misa del Gallo en esa capilla maravillosa.
Todos son recuerdos muy gratos de mi niñez.
Gracias a quien se ha acordado de sacar a la luz a esta y otras monjas del convento de nuestro pueblo.
Que recuerdos más gratos tengo del convento, donde oia la misa del Gallo en esa capilla maravillosa.
Todos son recuerdos muy gratos de mi niñez.
Gracias a quien se ha acordado de sacar a la luz a esta y otras monjas del convento de nuestro pueblo.