El otoño da sus últimos coletazos
Todos sabemos que la estación del otoño esta ya muy avanzada y es preludio del cercano invierno. Aunque este año parece que se ha adelantado. Pero aún estamos a tiempo de meternos si no nos hemos metido ya en el otoño de Tierra de campos. Para poder disfrutar de ese paisaje propio, de sus particulares colores: ese ocre amarillento, ese verde, de esas diferentes especies arbóreas como los chopos, los álamos, los olmos.... etc De saborear de esos olores que los tiene y muy intensos. Salir al campo para poder disfrutar directamente de la naturaleza. Los árboles en su mayoría de hoja caduca han dejado ya caer sus hojas para que tomen contacto con el suelo, las más resistentes que se resisten a caer lo harán en breve. ¿Quién lo diría? cuando no hace mucho brotaban con tanta fuerza y nosotros buscábamos su sombra para resguardarnos de los rayos solares. Pero es ley de vida, nacieron para morir tras acabar su ciclo. Y para que la primavera que viene puedan venir con nueva vestimenta antes tienen que desprenderse de la vieja. El viento, la lluvia, las heladas... etc acabarán con esas hojas que alfombran el tapete terrestre.
Estos días precisamente nos habremos dado cuenta que el proceso de la caída de la hoja se ha acelerado, su intensidad ha aumentado.... puede ser por la venida de estos fríos invernales adelantados. Con esta imagen entre bucólica y un poco triste permanecerán los campos hasta que vuelva a brotar la vida. Esta situación es pasajera y tiene fecha de caducidad, es lo que tienen las estaciones. Los árboles se quedarán desnudos de su ropaje y obligará a los abundantes pardales a buscar cobijo en otros sitios. El grano sembrado se esconderá en la tierra par salir con nuevos bríos en primavera.
Así es la vida, así que disfrutemos de lo que nos queda de otoño que se nos va. El invierno viene empujando este año fuerte y quiere erigirse en protagonista.
Felicidades amigos. Otra vez que lo habéis logrado.
Todos sabemos que la estación del otoño esta ya muy avanzada y es preludio del cercano invierno. Aunque este año parece que se ha adelantado. Pero aún estamos a tiempo de meternos si no nos hemos metido ya en el otoño de Tierra de campos. Para poder disfrutar de ese paisaje propio, de sus particulares colores: ese ocre amarillento, ese verde, de esas diferentes especies arbóreas como los chopos, los álamos, los olmos.... etc De saborear de esos olores que los tiene y muy intensos. Salir al campo para poder disfrutar directamente de la naturaleza. Los árboles en su mayoría de hoja caduca han dejado ya caer sus hojas para que tomen contacto con el suelo, las más resistentes que se resisten a caer lo harán en breve. ¿Quién lo diría? cuando no hace mucho brotaban con tanta fuerza y nosotros buscábamos su sombra para resguardarnos de los rayos solares. Pero es ley de vida, nacieron para morir tras acabar su ciclo. Y para que la primavera que viene puedan venir con nueva vestimenta antes tienen que desprenderse de la vieja. El viento, la lluvia, las heladas... etc acabarán con esas hojas que alfombran el tapete terrestre.
Estos días precisamente nos habremos dado cuenta que el proceso de la caída de la hoja se ha acelerado, su intensidad ha aumentado.... puede ser por la venida de estos fríos invernales adelantados. Con esta imagen entre bucólica y un poco triste permanecerán los campos hasta que vuelva a brotar la vida. Esta situación es pasajera y tiene fecha de caducidad, es lo que tienen las estaciones. Los árboles se quedarán desnudos de su ropaje y obligará a los abundantes pardales a buscar cobijo en otros sitios. El grano sembrado se esconderá en la tierra par salir con nuevos bríos en primavera.
Así es la vida, así que disfrutemos de lo que nos queda de otoño que se nos va. El invierno viene empujando este año fuerte y quiere erigirse en protagonista.
Felicidades amigos. Otra vez que lo habéis logrado.