Ahora os lo he copiado bien, que se me habían mezclado las columnas. Espero que os guste.
GOMEZ-NARRO AL AMANECER
Desde muy niño yo ví
Romper el día en mi pueblo.
El romper no suena bien
Pero en este caso es bello.
Las estrellas se despiden
Del más hermoso lucero,
Ese lucero del alba
Que brilla en el firmamento.
Que se oculta con la aurora
Al enrojecer el cielo
Con el resplandor del sol
Que ilumina un día nuevo.
Oigo cantar a las aves
Y ladrar a un noble perro.
¡Qué hermosura oír y ver
romper el día en mi pueblo!
Si en esas horas también
Escucho el cantar de un carro,
Pongo toda mi atención
Que es un cante muy apreciado
Pues el hombre bueno y serio
En su trabajo y sus tratos,
para confirmarlos dice:
“Cuando yo hablo canta un carro”
¡Qué bonito oír la voz
de un gran mulero y su eco,
mandándole a su pareja
Al trote y al paso lento!
¡Qué bonito oír su trote!
¡Qué bonito el paso lento!
clareando la mañana
Y cantando un carro nuevo.
Y es que ver amanecer
Llena de gozo mi cuerpo
en toda la geografía,
Y en especial, en mi pueblo.
Valeriano Sobrino
GOMEZ-NARRO AL AMANECER
Desde muy niño yo ví
Romper el día en mi pueblo.
El romper no suena bien
Pero en este caso es bello.
Las estrellas se despiden
Del más hermoso lucero,
Ese lucero del alba
Que brilla en el firmamento.
Que se oculta con la aurora
Al enrojecer el cielo
Con el resplandor del sol
Que ilumina un día nuevo.
Oigo cantar a las aves
Y ladrar a un noble perro.
¡Qué hermosura oír y ver
romper el día en mi pueblo!
Si en esas horas también
Escucho el cantar de un carro,
Pongo toda mi atención
Que es un cante muy apreciado
Pues el hombre bueno y serio
En su trabajo y sus tratos,
para confirmarlos dice:
“Cuando yo hablo canta un carro”
¡Qué bonito oír la voz
de un gran mulero y su eco,
mandándole a su pareja
Al trote y al paso lento!
¡Qué bonito oír su trote!
¡Qué bonito el paso lento!
clareando la mañana
Y cantando un carro nuevo.
Y es que ver amanecer
Llena de gozo mi cuerpo
en toda la geografía,
Y en especial, en mi pueblo.
Valeriano Sobrino