Sé que muchos faltaron, fuiste una persona buena en el mejor sentido de la palabra. Lo que debería haber sido motivo para un adiós multitudinario, mucha gente te conocía, te escuchó en tus homilias, te recibió en sus templos. Sé que aunque no estuvieron físicamente te querían. gracias por todo lo que has ayudado y amado a la gente. Nunca lo vi disgustado, amable y sonriente fueron distintivo y una actitud de vida.