La aleluya es una humilde hierba de flores blancas cuyas hojas se asemejan a las del trébol. Su utilidad para el aventurero se centra en sus propiedades alimenticias y medicinales, aunque debe usarse con moderación, ya que puede presentar cierta toxicidad.
Comestible
Las hojas de aleluya tienen un agradable sabor ácido que puede sustituir al limón y las convierte en un excelente aliño para ensaladas, verduras y sopas silvestres.