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LA BATALLA DE TORDESILLAS QUE DIRIGIO ALMANZOR. AÑO, 987,
Cuentan las viejas historias, que el Caudillo Almanzor, en el califato de Córdoba, llegó a formar un ejercito de 25,000, soldados, bien perpetrados y armados, era en aquellos años el famoso Almanzor, lo que hoy día llamaríamos ministro de la guerra y de la economía, hijo de musulmanes arruinados, y viviendo en Andalucía, su paso por el Califato, le hicieron ser un hombre duro, y defensor del poderío musulmán, decidió entonces poner en marcha, el aparato de guerra, para ir reconquistando, las tierras que los cristianos del norte, le habían ido ocupando, en aquella terrible aventura, Almanzor fue arrasando, castillos y fortalezas, como la de Simancas, y otras muchas más y ciudades como León, a la vez que su deseo era llegar a Santiago de Compostela, piedra firme del cristianismo de aquella época, donde arrancaría sus campanas de la iglesia mayor, y en hombros de prisioneros cristianos, trasladaría, a Córdoba, donde el rey Fernando III el Santo el año 1234, devolvería a su lugar de origen, esta vez a hombros de prisioneros musulmanes. La batalla de Tarde en sillas, fue su paso por la ribera del Duero, y dicen algunas leyendas, que fue colocado ese nombre, por llegar tarde a caballo sus defensores guerreros, aunque dicen después ciertos observadores, que si hubieran llegado a tiempo, la batalla seguro que la hubiera ganado Almanzor, al tener un ejercito más numeroso y organizado. Parece que dicho Caudillo, no dejaba títere con cabeza, hasta uno de sus suegros fue desafiado en los campos de Soria, y le dio muerte de un lanzazo en dicho desafío, su pasada por tierras leonesas y castellanas, fueron pasos terribles de destrucción, su ambición era aniquilar el cristianismo existente de aquellos años. De nuevo el año 1001, empezó su nueva invasión sobre los reinos de Aragón y Cataluña, donde dejo sus huellas grabadas en ciertas ciudades, luego un poco más tarde marcharía a Navarra, donde el año 1002, batallando contra los cristianos franceses navarros y otros soldados de otras latitudes en las plazas donde hoy es Estella y Tafalla, en los primeros días del mes de junio, se sintió enfermo, puede ser lo que hoy día llamamos, cáncer de intestino, en aquellos años no se conocía el pronostico, y preguntando a sus asesores, les comento. “ donde se encontraban los mejores médicos del Andaluz”, a lo que le contestaron, En Córdoba, Medina del Campo y Medinaceli, que todos eran médicos judíos, el sin lugar a dudas comento, derechos a Medinaceli, me siento enfermo, sin dudar sus generales, indicaron a la tropa su retorno a suelo entonces mahometano, aunque no se cumpliría su objetivo, ya que el día 16, de junio parece que murió en Bordecores, Soria, en el camino a caballo que conduce a Medinaceli, en dicha fecha hay bastantes variaciones, otros dicen que el día 9, de dicho mes y otros el día 2, del mismo mes, solo se sabe de cierto, que fue enterrado en Medinaceli, donde llego ya cadáver, y los médicos hebreos, no pudieron hacer nada por el, parece que la noche anterior, durmió en el castillo de Calatañazor, y algunos cristianos, que vieron como abandonaba la lucha en el campo de batalla de Navarra, parece que le siguieron en su retorno hacia Calatañazor, donde descanso y pidió de nuevo salir a galope tendido, sin hacer caso a los perseguidores, que seguramente, hubieran sido eliminados, de no estar en estado moribundo. Al salir de Calatañazor, sus hombres y caballos evitaron la batalla, y continuaron como era su mandato, hasta la ciudad de Medinaceli, donde solo pudieron hacer por el, un gran mausoleo, que fue visitado por las tres culturas existentes en la península Ibérica, en aquellos años, que eran la musulmana, cristiana y Hebrea. Hasta el año 1500, que Isabel la Católica, dando una orden talibana, ordeno destruir todos los monumentos mezquitas sinagogas y demás objetos que no sirvieran para caballerizas, del estado, graneros o otros menesteres que no sirvieran a la iglesia católica, el mausoleo de Almanzor fue destruido sin más contemplaciones, y su sombra sigue permanente, en algunos lugares del terrible recorrido que trazo desde Córdoba, para aniquilar, toda la resistencia cristiana sobre el valle del Duero, y entre ellas Simancas y Tordesillas, donde dejo las cenizas de todo su imperio y poderío, Tordesillas aun no olvido su historia, ya que su emblema municipal, son dos llaves y dos monturas de caballos, que indican parte de su historia. G X Cantalapiedra. 14 – 9 – 2015.
Cuentan las viejas historias, que el Caudillo Almanzor, en el califato de Córdoba, llegó a formar un ejercito de 25,000, soldados, bien perpetrados y armados, era en aquellos años el famoso Almanzor, lo que hoy día llamaríamos ministro de la guerra y de la economía, hijo de musulmanes arruinados, y viviendo en Andalucía, su paso por el Califato, le hicieron ser un hombre duro, y defensor del poderío musulmán, decidió entonces poner en marcha, el aparato de guerra, para ir reconquistando, las tierras que los cristianos del norte, le habían ido ocupando, en aquella terrible aventura, Almanzor fue arrasando, castillos y fortalezas, como la de Simancas, y otras muchas más y ciudades como León, a la vez que su deseo era llegar a Santiago de Compostela, piedra firme del cristianismo de aquella época, donde arrancaría sus campanas de la iglesia mayor, y en hombros de prisioneros cristianos, trasladaría, a Córdoba, donde el rey Fernando III el Santo el año 1234, devolvería a su lugar de origen, esta vez a hombros de prisioneros musulmanes. La batalla de Tarde en sillas, fue su paso por la ribera del Duero, y dicen algunas leyendas, que fue colocado ese nombre, por llegar tarde a caballo sus defensores guerreros, aunque dicen después ciertos observadores, que si hubieran llegado a tiempo, la batalla seguro que la hubiera ganado Almanzor, al tener un ejercito más numeroso y organizado. Parece que dicho Caudillo, no dejaba títere con cabeza, hasta uno de sus suegros fue desafiado en los campos de Soria, y le dio muerte de un lanzazo en dicho desafío, su pasada por tierras leonesas y castellanas, fueron pasos terribles de destrucción, su ambición era aniquilar el cristianismo existente de aquellos años. De nuevo el año 1001, empezó su nueva invasión sobre los reinos de Aragón y Cataluña, donde dejo sus huellas grabadas en ciertas ciudades, luego un poco más tarde marcharía a Navarra, donde el año 1002, batallando contra los cristianos franceses navarros y otros soldados de otras latitudes en las plazas donde hoy es Estella y Tafalla, en los primeros días del mes de junio, se sintió enfermo, puede ser lo que hoy día llamamos, cáncer de intestino, en aquellos años no se conocía el pronostico, y preguntando a sus asesores, les comento. “ donde se encontraban los mejores médicos del Andaluz”, a lo que le contestaron, En Córdoba, Medina del Campo y Medinaceli, que todos eran médicos judíos, el sin lugar a dudas comento, derechos a Medinaceli, me siento enfermo, sin dudar sus generales, indicaron a la tropa su retorno a suelo entonces mahometano, aunque no se cumpliría su objetivo, ya que el día 16, de junio parece que murió en Bordecores, Soria, en el camino a caballo que conduce a Medinaceli, en dicha fecha hay bastantes variaciones, otros dicen que el día 9, de dicho mes y otros el día 2, del mismo mes, solo se sabe de cierto, que fue enterrado en Medinaceli, donde llego ya cadáver, y los médicos hebreos, no pudieron hacer nada por el, parece que la noche anterior, durmió en el castillo de Calatañazor, y algunos cristianos, que vieron como abandonaba la lucha en el campo de batalla de Navarra, parece que le siguieron en su retorno hacia Calatañazor, donde descanso y pidió de nuevo salir a galope tendido, sin hacer caso a los perseguidores, que seguramente, hubieran sido eliminados, de no estar en estado moribundo. Al salir de Calatañazor, sus hombres y caballos evitaron la batalla, y continuaron como era su mandato, hasta la ciudad de Medinaceli, donde solo pudieron hacer por el, un gran mausoleo, que fue visitado por las tres culturas existentes en la península Ibérica, en aquellos años, que eran la musulmana, cristiana y Hebrea. Hasta el año 1500, que Isabel la Católica, dando una orden talibana, ordeno destruir todos los monumentos mezquitas sinagogas y demás objetos que no sirvieran para caballerizas, del estado, graneros o otros menesteres que no sirvieran a la iglesia católica, el mausoleo de Almanzor fue destruido sin más contemplaciones, y su sombra sigue permanente, en algunos lugares del terrible recorrido que trazo desde Córdoba, para aniquilar, toda la resistencia cristiana sobre el valle del Duero, y entre ellas Simancas y Tordesillas, donde dejo las cenizas de todo su imperio y poderío, Tordesillas aun no olvido su historia, ya que su emblema municipal, son dos llaves y dos monturas de caballos, que indican parte de su historia. G X Cantalapiedra. 14 – 9 – 2015.
