Situado en el borde del páramo en un extremo del
pueblo, defendía el paso entre la Tierra de
Campos y el
Campo de
Toro. Perteneció a la corona del Reino de
León, a los Téllez de Meneses y, desde 1445, a la
Casa de Osuna.
La
torre dispone de cuatro plantas, además de un sótano que sirvió de prisión; todo ello en consonancia con sus labores defensivas y de residencia del señor.