TORDESILLAS SIN LAMENTOS AL DUERO
En estas fechas sencillas
que suenan a romancero,
voy pensando en Tordesillas
balcón del famoso Duero.
Cuando las penas nos siguen
sin entender de condenas,
algunos virus persiguen
hacer daños en las venas.
Tordesillas con reflejos
del agua del río Duero,
su Vega nunca está lejos
al ver amor verdadero.
Que no suenen las campanas,
por el virus pendenciero,
quiere romper vidas sanas
entre sonidos del Duero.
Tordesillanos en casa
sin poner ningún letrero,
el virus por donde pasa
es un maldito agorero.
Dicen que suenan lamentos
por La Ribera del Duero,
gritando los descontentos
de este virus pasajero.
Con los temores flotando
sobre las aguas del Duero,
el virus puede ir dejando
su delirio traicionero.
Cerrándole los caminos
que nunca te dan consuelo,
los virus no son divinos
aunque a veces busquen cielo.
Todas ventanas cerradas
con los cerrojos de acero,
que las calles angustiadas
quisieran mirar al Duero.
G X Cantalapiedra.
25 – 3 – 2020.
En estas fechas sencillas
que suenan a romancero,
voy pensando en Tordesillas
balcón del famoso Duero.
Cuando las penas nos siguen
sin entender de condenas,
algunos virus persiguen
hacer daños en las venas.
Tordesillas con reflejos
del agua del río Duero,
su Vega nunca está lejos
al ver amor verdadero.
Que no suenen las campanas,
por el virus pendenciero,
quiere romper vidas sanas
entre sonidos del Duero.
Tordesillanos en casa
sin poner ningún letrero,
el virus por donde pasa
es un maldito agorero.
Dicen que suenan lamentos
por La Ribera del Duero,
gritando los descontentos
de este virus pasajero.
Con los temores flotando
sobre las aguas del Duero,
el virus puede ir dejando
su delirio traicionero.
Cerrándole los caminos
que nunca te dan consuelo,
los virus no son divinos
aunque a veces busquen cielo.
Todas ventanas cerradas
con los cerrojos de acero,
que las calles angustiadas
quisieran mirar al Duero.
G X Cantalapiedra.
25 – 3 – 2020.