TORDESILLAS MIRANDO A LA PEÑA
Estamos mirando al Duero para vivir la nostalgia, de estos tiempos agoreros que no nos sirven de magia. La Peña sigue en silencio, El Duero no se contagia, nadie quiere hacer desprecio si ves la tarde muy lacia. Tordesillas de pasiones cargadas de fuertes lanzas, la Peña da sensaciones de vivir entre templanzas. Nadie se siente impotente, ni nadie rompe la magia, esta tierra es competente y sabe tener su gracia. Cuando las tardes terminan y la pandemia se lanza, muchos sueños se eliminan al ver que el llanto te alcanza. Hoy que suspiran los pinos de esta tierra castellana, no sirven los adivinos que tienen la mente vana. Tordesillas y La Peña, son don pasiones centradas, en esta fecha es la dueña de sus fiestas bien llevadas. Caminar junto a la Ermita, entre sombras encantadas, y ver como el pueblo grita en las horas celebradas. No debemos lamentarnos por esta peste anunciada, hoy buscamos entendernos si verla en la madrugada. Tordesillas con razones deja las fiestas guardadas, ya vendrán las ocasiones de no verlas contagiadas. En este mes de septiembre Tordesillas ni reclama, la pandemia deja fiebre que puede romper la calma. No pongamos cicatrices que puedan dañar el alma, ni buscar quizá deslices en donde nadie reclama. La Peña mirando al Duero es una imagen guardada, donde cualquier romancero ve su corriente admirada. Pronto pasará septiembre y sus fiestas recordadas, y temeremos noviembre por si comienzan heladas. Tordesillas con grandezas que nadie puede borrarlas, estos tiempos con torpezas las vidas hay que cuidarlas. G X Cantalapiedra. 6 – 9 – 2020.
Estamos mirando al Duero para vivir la nostalgia, de estos tiempos agoreros que no nos sirven de magia. La Peña sigue en silencio, El Duero no se contagia, nadie quiere hacer desprecio si ves la tarde muy lacia. Tordesillas de pasiones cargadas de fuertes lanzas, la Peña da sensaciones de vivir entre templanzas. Nadie se siente impotente, ni nadie rompe la magia, esta tierra es competente y sabe tener su gracia. Cuando las tardes terminan y la pandemia se lanza, muchos sueños se eliminan al ver que el llanto te alcanza. Hoy que suspiran los pinos de esta tierra castellana, no sirven los adivinos que tienen la mente vana. Tordesillas y La Peña, son don pasiones centradas, en esta fecha es la dueña de sus fiestas bien llevadas. Caminar junto a la Ermita, entre sombras encantadas, y ver como el pueblo grita en las horas celebradas. No debemos lamentarnos por esta peste anunciada, hoy buscamos entendernos si verla en la madrugada. Tordesillas con razones deja las fiestas guardadas, ya vendrán las ocasiones de no verlas contagiadas. En este mes de septiembre Tordesillas ni reclama, la pandemia deja fiebre que puede romper la calma. No pongamos cicatrices que puedan dañar el alma, ni buscar quizá deslices en donde nadie reclama. La Peña mirando al Duero es una imagen guardada, donde cualquier romancero ve su corriente admirada. Pronto pasará septiembre y sus fiestas recordadas, y temeremos noviembre por si comienzan heladas. Tordesillas con grandezas que nadie puede borrarlas, estos tiempos con torpezas las vidas hay que cuidarlas. G X Cantalapiedra. 6 – 9 – 2020.