LAMENTOS DEL RÍO DUERO
El Duero viene gritando al llegar a Tordesillas, el viento silba llorando con sus frases más sencillas. Lamentos que suelta el Duero en su perfecta armonía, el Río que es altanero siempre derrocha alegría. Estas jornadas de invierno con fríos algunos días, hacen a febrero eterno entre vientos de porfías. El Duero suelta lamentos sin recordar agonías, son muchos los sufrimientos que dejan sus letanías. El Duero marcha tranquilo, repleto de sinfonías, sobre sus aguas perfilo otras nuevas melodías. Viendo las aguas del Duero que tienen su simpatía, el hombre más agorero puede gritar su valía. Derrochando los sonidos entre brisas y aguaceros, los puentes siguen erguidos soñando con caballeros. Cuando el Duero se despide de los pinos piñoneros, alguien muy lejos escribe historias de aventureros. Vienen gritando lamentos las aguas del Río Duero, la peste con sufrimientos es un tiempo traicionero. La pandemia sigue activa, quiere dejar su recuerdo, cualquier cosa la motiva sin ver al humano cuerdo. Los fríos están presentes en las orillas del Duero, y marcan muchos ambientes incluso con ROMANCERO. Estas jornadas tan locas, que siempre tiene febrero, piensas que existen las rocas y gentes como en enero. Estos días invernales que arrastran los malos hielos, nadie los ve naturales y más si pisas sus suelos. Los álamos están tristes, el invierno es duradero, muchas hierbas se resisten a este sol tan tempranero. Pueden cantar los gorriones en la Ribera del Duero, y dejarnos las razones de este tiempo aventurero. Llegaran las golondrinas para adornar muchas calles, visitaran las colinas que tienen ciertos detalles. G X Cantalapiedra.
El Duero viene gritando al llegar a Tordesillas, el viento silba llorando con sus frases más sencillas. Lamentos que suelta el Duero en su perfecta armonía, el Río que es altanero siempre derrocha alegría. Estas jornadas de invierno con fríos algunos días, hacen a febrero eterno entre vientos de porfías. El Duero suelta lamentos sin recordar agonías, son muchos los sufrimientos que dejan sus letanías. El Duero marcha tranquilo, repleto de sinfonías, sobre sus aguas perfilo otras nuevas melodías. Viendo las aguas del Duero que tienen su simpatía, el hombre más agorero puede gritar su valía. Derrochando los sonidos entre brisas y aguaceros, los puentes siguen erguidos soñando con caballeros. Cuando el Duero se despide de los pinos piñoneros, alguien muy lejos escribe historias de aventureros. Vienen gritando lamentos las aguas del Río Duero, la peste con sufrimientos es un tiempo traicionero. La pandemia sigue activa, quiere dejar su recuerdo, cualquier cosa la motiva sin ver al humano cuerdo. Los fríos están presentes en las orillas del Duero, y marcan muchos ambientes incluso con ROMANCERO. Estas jornadas tan locas, que siempre tiene febrero, piensas que existen las rocas y gentes como en enero. Estos días invernales que arrastran los malos hielos, nadie los ve naturales y más si pisas sus suelos. Los álamos están tristes, el invierno es duradero, muchas hierbas se resisten a este sol tan tempranero. Pueden cantar los gorriones en la Ribera del Duero, y dejarnos las razones de este tiempo aventurero. Llegaran las golondrinas para adornar muchas calles, visitaran las colinas que tienen ciertos detalles. G X Cantalapiedra.