SI SE CONFUNDEN PALABRAS
Si se confunden las frases sin ser los humanos viejos, quizá les sobren las bases de sufrir ciertos complejos. Por las orillas del Duero puede que se noten llantos, y sentir el ROMANCERO que suele dejar encantos. Si se confunden palabras que pueden tener enredos, no busques jamás las arras que tienen algunos credos. Cuando las noches son dulces cargadas de sentimiento, piensas en las grandes luces que parecen darte aliento. Mirando los viejos pinos que saben de fríos vientos, hoy temen los desatinos al conocer sufrimientos. Dejar que siga la vida, mirar como corre el viento, en esta tierra elegida se conoce el sentimiento. La pandemia va marcando muchos y malos recuerdos, la vida sigue aflorando son sus momentos más cuerdos. No debemos estar tristes, ni pensar en el infierno, los humanos que resisten sueñan el amor eterno. No confundir las palabras, ni anular nunca el aliento, las ovejas y las cabras buscan su bello momento. Estas fechas de pandemia donde sientes mucho el viento, no temas esa tragedia que solo da sufrimiento. Se confunden ciertos temas, los virus siguen corriendo, ellos tiene sus esquemas para seguir confundiendo. No temen a las murallas esos virus traicioneros, y suelen saltar las vallas en muchos de los senderos. Que nadie se sienta libre, ni quiera gritar al viento, alguna mente describe ese mal comportamiento. El mañana nos espera, no sé si con buenos vientos, hoy vemos la primavera muy cargada de lamentos. El Duero marca destinos, con fríos que son de invierno, mañana por los caminos notaremos el infierno. Los corazones no piensan, tan solo sienten los hechos, estas jornadas son tensas hasta en los buenos barbechos. Tordesillas de esperanzas que buscan sueños perfectos, para lograr las templanzas y ver los caminos rectos. G X Cantalapiedra.
Si se confunden las frases sin ser los humanos viejos, quizá les sobren las bases de sufrir ciertos complejos. Por las orillas del Duero puede que se noten llantos, y sentir el ROMANCERO que suele dejar encantos. Si se confunden palabras que pueden tener enredos, no busques jamás las arras que tienen algunos credos. Cuando las noches son dulces cargadas de sentimiento, piensas en las grandes luces que parecen darte aliento. Mirando los viejos pinos que saben de fríos vientos, hoy temen los desatinos al conocer sufrimientos. Dejar que siga la vida, mirar como corre el viento, en esta tierra elegida se conoce el sentimiento. La pandemia va marcando muchos y malos recuerdos, la vida sigue aflorando son sus momentos más cuerdos. No debemos estar tristes, ni pensar en el infierno, los humanos que resisten sueñan el amor eterno. No confundir las palabras, ni anular nunca el aliento, las ovejas y las cabras buscan su bello momento. Estas fechas de pandemia donde sientes mucho el viento, no temas esa tragedia que solo da sufrimiento. Se confunden ciertos temas, los virus siguen corriendo, ellos tiene sus esquemas para seguir confundiendo. No temen a las murallas esos virus traicioneros, y suelen saltar las vallas en muchos de los senderos. Que nadie se sienta libre, ni quiera gritar al viento, alguna mente describe ese mal comportamiento. El mañana nos espera, no sé si con buenos vientos, hoy vemos la primavera muy cargada de lamentos. El Duero marca destinos, con fríos que son de invierno, mañana por los caminos notaremos el infierno. Los corazones no piensan, tan solo sienten los hechos, estas jornadas son tensas hasta en los buenos barbechos. Tordesillas de esperanzas que buscan sueños perfectos, para lograr las templanzas y ver los caminos rectos. G X Cantalapiedra.