EL AYER DEJÓ SUS HUELLAS
Cuando buscas los remedios
que la vida va encontrando,
quieres luchar con tus medios
para seguir caminando.
El ayer se fue marchando
con sus lamentos perdidos,
el viento nos va dejando
muchos suspiros vencidos.
Cuando dudas del presente
por no encontrar soluciones,
temes sufrir el ambiente
de nefastas negaciones.
El tiempo marca las huellas
de penosas tentaciones,
con muchas noches muy bellas
que tuvieron conclusiones.
El ayer en Tordesillas
tuvo sueños penitentes,
donde las gentes sencillas
nunca fueron exigentes.
Hoy se buscan maravillas
que nadie las ve presentes,
nos dicen que en Tordesillas
se ven rutas diferentes.
Un Puente viejo Romano
que nos deja sensaciones,
de ver el Duero más sano
que deja mil soluciones.
El ayer sigue marcado,
y el presente se presenta,
como un diablo mal llegado
que con la niebla se ausenta.
El ayer marcó pinares
que parecen primorosos,
en esos bellos lugares
corren vientos armoniosos.
Tordesillas de esperanzas
envueltas en ROMANCERO,
sin hablar nunca de lanzas
se comprende al mensajero.
G X Cantalapiedra.
Cuando buscas los remedios
que la vida va encontrando,
quieres luchar con tus medios
para seguir caminando.
El ayer se fue marchando
con sus lamentos perdidos,
el viento nos va dejando
muchos suspiros vencidos.
Cuando dudas del presente
por no encontrar soluciones,
temes sufrir el ambiente
de nefastas negaciones.
El tiempo marca las huellas
de penosas tentaciones,
con muchas noches muy bellas
que tuvieron conclusiones.
El ayer en Tordesillas
tuvo sueños penitentes,
donde las gentes sencillas
nunca fueron exigentes.
Hoy se buscan maravillas
que nadie las ve presentes,
nos dicen que en Tordesillas
se ven rutas diferentes.
Un Puente viejo Romano
que nos deja sensaciones,
de ver el Duero más sano
que deja mil soluciones.
El ayer sigue marcado,
y el presente se presenta,
como un diablo mal llegado
que con la niebla se ausenta.
El ayer marcó pinares
que parecen primorosos,
en esos bellos lugares
corren vientos armoniosos.
Tordesillas de esperanzas
envueltas en ROMANCERO,
sin hablar nunca de lanzas
se comprende al mensajero.
G X Cantalapiedra.