TORDESILLAS: ERA UNA TARDE DE ENERO...

ERA UNA TARDE DE ENERO
No te sientas más bonito,
ni sueñes ser caballero,
nunca lances ese grito
del poderoso dinero.

No pregones tus bondades,
ni quieres ser altanero,
tus muchas fatalidades
te dejaran sin dinero.

Vas marcando tu camino
por La Ribera del Duero,
más eres el desatino
de ser un hombre embustero.

En esa tarde de enero
solo note su desgracia,
al no verle caballero
y tener su mente lacia.

Pasando por Tordesillas
sufriendo niebla encantada,
divise las maravillas
de esa tierra iluminada.

Vi Tordesillas sin flores
en estas frías jornadas,
donde crecen los dolores
de las personas dañadas.

Con la mirada sencilla
entre luces enmarcadas,
quise visitar la villa
sin ver pasiones borradas.

No sirve gritar al viento
y menos de madrugada,
nadie quiere el pensamiento
de una etapa malograda.

El Duero marcha tranquilo,
su Vega sigue callada,
en mi recuerdo perfilo
la más preciosa alborada.
G X Cantalapiedra.