La Atalaya, símbolo de Traspinedo, es un roble y desde hace muchos años subíamos los niños a comer el chaparrón el domingo de Pascua de Resurrección. En homenaje y recuerdo de mi infancia quiero dedicarle estos versos:
Atalaya de mi pueblo,
árbol noble y milenario
Que has visto a generaciones
Bailar el pingo chumarro.
¿Quién de niño no ha subido
Por Pascua de Resurrección, y
Debajo de su sombra
No ha comido el chaparrón?.
Todos allí reunidos,
Ya sentados o en cuclillas,
Comíamos mantecados,
Magdalenas y rosquillas.
Después de haberlo comido
Todos contábamos cuentos,
Quizá los que antes contaron
Nuestros padres y nuestros abuelos.
Dicen que tendrás 100 años.
Yo creo que eres milenio
Porque Traspinedo y tú
Nacisteis al mismo tiempo.
Todos te llamamos pino
Pero tu madera es noble,
Y si es noble tu madera
Es porque eres un roble.
Eres fuerte como un roble.
Dice un refrán verdadero:
Tu fuerza iguala a las rocas
Que detienen al mar fiero.
A truenos y tempestades
Tú nunca miedo les tienes,
Porque después que ellos pasan
Tú con mas fuerza te yergues.
Atalaya de mi pueblo,
árbol noble y milenario
Que has visto a generaciones
Bailar el pingo chumarro.
¿Quién de niño no ha subido
Por Pascua de Resurrección, y
Debajo de su sombra
No ha comido el chaparrón?.
Todos allí reunidos,
Ya sentados o en cuclillas,
Comíamos mantecados,
Magdalenas y rosquillas.
Después de haberlo comido
Todos contábamos cuentos,
Quizá los que antes contaron
Nuestros padres y nuestros abuelos.
Dicen que tendrás 100 años.
Yo creo que eres milenio
Porque Traspinedo y tú
Nacisteis al mismo tiempo.
Todos te llamamos pino
Pero tu madera es noble,
Y si es noble tu madera
Es porque eres un roble.
Eres fuerte como un roble.
Dice un refrán verdadero:
Tu fuerza iguala a las rocas
Que detienen al mar fiero.
A truenos y tempestades
Tú nunca miedo les tienes,
Porque después que ellos pasan
Tú con mas fuerza te yergues.