Finaliza el verano y el clima social parece más tranquilo, creemos que solo en apariencia, nuevas realidades, nuevas desavenencias, nuevos reencuentros, antiguos litigios, personas serviles que no saben el propósito de su acciones inducidas, líderes y líderesas sin trono, pensadores arrepentidos de acciones impuestas, antiguas formas de hacer no tan "antiguas", apariencias destapadas, amores interesados, trabajadores orgullosos de serlo, vividores incorregibles, todo en un pequeño pueblo de la estepa castellana. Otro verano vendrá y nuevas aventuras se vivirán, hasta el año que viene.
Ala, hasta el año que viene.