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En el “Tablón de Anuncios” del Ayuntamiento de Villafrechós aparecía (por lo menos hasta el día 3 de agosto de 2022) el siguiente
Bando:
Colaboración del Ayuntamiento de
de Villafrechós al Libro
“Atar cabos en Villafrechós”, autor José Cubero
Concepto Importe
– Factura imprenta. 3.661,40 euros
– Factura imprenta 1.454,56 euros
– Regalo de un ejemplar por familia
(Cortesía del Ayuntamiento)
– Refresco presentación del libro 998,25 euros
Villafrechós, a 16 de septiembre de 2013
Fdo. Miguel Ángel Gómez Vaquero (Alcalde)
Para desenredar la madeja, dividamos el asunto en 3 apartados:
I) TABLÓN DE ANUNCIOS
No tiene sentido que este “Bando” esté colgado en el “Tablón de Anuncios” del Ayuntamiento durante 9 años por el nulo interés para los vecinos, como veremos.
¿No tendrían más interés para este “Tablón de Anuncios” otros temas? Por ejemplo:
1) Saber quién hizo el escudo y la bandera municipal, que, por cierto, el Ayuntamiento no ha pagado un euro.
2) Aclarar la “falacia” de que los alcaldes y concejales de pueblos pequeños no cobran dinero por ejercer sus funciones, si exceptuamos los teléfonos, las tarjetas de crédito, los desplazamientos en coche y las dietas, incluso que sea la misma persona, si pertenece a la corporación municipal, la que contrata un trabajo y la que lo realiza, y, además, lo cobra. Hecha la ley, hecha la trampa.
A) La Ley 7/1985, de 2 de abril, Reguladora de las Bases del Régimen Local, indica en su artículo 46.2 a): “El Pleno celebra sesión ordinaria… cada tres meses en los municipos de hasta 5.000 habitantes”.
B) En el año 2008, por ejemplo, el Ayuntamiento de Villafrechós celebró 8 “sesiones” en 3 meses (de 22 “sesiones” anuales), que duraban en torno a 1 hora, al mediodía. ¿Por qué chirrían tantas sesiones y convendría explicarlas? Muy sencillo: por cada sesión cobraba cada uno de los asistentes 36,00 euros en 2008, como “dieta”, según figura en los datos facilitados por el Ayuntamiento.
II) LIBRO
Características técnicas
Libro de 432 páginas, con un formato de 17 x 24 centímetros. Impreso a 4/4 colores en papel interior estucado brillo de 150 gramos; papel de cubierta, impresa a 4/0, en un estucado brillo de 350 gramos. Cubierta con solapa plastificada. Cosido a hilo.
Tirada: 1.023 ejemplares (comprados por el Ayuntamiento de Villafrechós: 559 ejemplares; comprados por la Diputación: 273 ejemplares; comprados por el propio autor: 191 ejemplares), que supuso un coste de 9.002,40 € (sin IVA) o 9.360,45 € (con IVA).
–Coste de autor: 0.
–Coste de editor: 0.
–Coste de imprenta:
1) Factura imprenta al Ayuntamiento (22/11/2012): 1.398,62 € (sin IVA) o 1.454,56 € (con IVA).
2) Factura imprenta al Ayuntamiento (24/11/2012): 3.520,58 € (sin IVA) o 3.661,40 € (con IVA).
3) El Ayuntamiento recibió a cambio de esos pagos: 559 ejemplares del libro “Atar cabos en Villafrechós”, o sea, cada libro le costó al Ayuntamiento 8,8 € (sin IVA) o 9,15 € (con IVA).
–El Ayuntamiento vendió cada ejemplar del libro: 10 €.
¿Dónde está el problema? Nadie obligó al Ayuntamiento de Villafrechós a comprar ejemplares del libro “Atar cabos en Villafrechós” (y menos todavía le obligó a participar en el refresco), prueba de ello es que el Ayuntamiento no compró ejemplares del libro “Las calles de Villafrechós”, y este libro se publicó y el autor decidió venderlo al precio de coste de imprenta (2,00 euros) en los distintos establecimientos de la villa, que colaboraron gustosamente.
Sin embargo, el Ayuntamiento en el libro “Atar cabos en Villafrechós”, como se ve, optó por venderlo a un precio superior al coste de imprenta.
¿Acaso desconoce ese “malintencionado bando” del “Tablón de Anuncios” que entre Vicente Cuadrillero y yo hicimos el libro “Las fiestas de Villafrechós”, lo publicamos, pagamos a pachas el coste de imprenta y se lo regalamos a la Cofradía de Nuestra Señora de Cabo para que pudiera arreglar algunos desperfectos de la ermita con lo que obtuviera de la venta del libro?
Con el escaso interés mostrado por la “historia de Villafrechós”, ¿cómo se le puede ocurrir al regidor de la villa decir que “siempre hemos estado buscando documentos del monasterio (Convento) y del pueblo en general” (“El Norte de Castilla”, 16/2/2014) para justificar la pretensión de hacer un viaje a Jerusalén en busca de fotocopias de documentos que están en el Archivo Histórico Nacional de Madrid, que sin duda es el mismo motivo esgrimido para ir a Estados Unidos a “mostrarle a Jeff Bezos un libro homenaje por los 25 años de Amazon, que pesa más de 100 kilos”? Para realizar dichos viajes a costa del erario público.
III) Refresco presentación del libro
El concepto que se esconde detrás de los 998,25 € corresponde a una factura ilegal o falsa.
Cuando se tomó la decisión de presentar el libro “Atar cabos en Villafrechós” en Villafrechós, la Confitería CUBERO de Valladolid dijo al autor del libro que el refresco que se ofreciera tras la presentación querrían darlo ellos, o sea, corría de su cuenta. Y le pidieron que simplemente les indicara cuántas personas podrían asistir, para aumentarlo en un 15%, y si tendrían que llevar ellos cubiertos de plástico. El autor se lo preguntó al alcalde en una ocasión que coincidió con él en Valladolid, y este insistió en que le presentara a los de la Confitería CUBERO, que no conocía. Así lo hizo en la Confitería CUBERO de la calle Pasión de Valladolid. Allí surgió la idea de que el Ayuntamiento querría participar en este refresco, idea a la que se oponían, inicialmente, los de la Confitería CUBERO, y sólo, tras una intervención del autor a favor de que se le permitiera al Ayuntamiento una mínima participación en el refresco, cedieron los de la Confitería CUBERO de Valladolid en sus intenciones iniciales.
No termina aquí todo este embrollo. Don Antonio Concejo Sáinz y el “Concejo Hospedería” de Valoria la Buena ofrecieron al autor, y así lo hicieron, que el vino del cacareado refresco corría de su cuenta, y mandaron 5 cajas de vino para el evento: 3 de vino tinto y 2 de vino dulce. Sobraron más de 3 cajas de vino, que fueron despachadas en días posteriores en el bar del hermano del alcalde, la persona o entidad que está detrás de la factura de marras, sin consultar ni solicitar permiso a su verdadero dueño, al que se lo habían regalado.
La factura que está detrás de los 998,25 € llama la atención, en primer lugar, por la cantidad: algo más de 998 € y algo menos de 1.000 €. Y ya saben todos por qué. Se conoce de sobra el caso de Laura Borràs, presidenta del Parlament de Cataluña.
Además, en esas fechas llegaron comunicaciones de HACIENDA a dos asociaciones sin ánimo de lucro de Villafrechós, en las que les advertían que, si tenían que hacer ingresos a la empresa que está detrás de esa factura, debían hacerlo en la Cuenta de Hacienda, ya que dicha empresa llevaba varios años sin estar al corriente de los pagos con HACIENDA, situación que la convertía automáticamente en una empresa que no puede facturar con la administración pública por “no estar al corriente de los pagos con Hacienda y la Seguridad Social”.
Bando:
Colaboración del Ayuntamiento de
de Villafrechós al Libro
“Atar cabos en Villafrechós”, autor José Cubero
Concepto Importe
– Factura imprenta. 3.661,40 euros
– Factura imprenta 1.454,56 euros
– Regalo de un ejemplar por familia
(Cortesía del Ayuntamiento)
– Refresco presentación del libro 998,25 euros
Villafrechós, a 16 de septiembre de 2013
Fdo. Miguel Ángel Gómez Vaquero (Alcalde)
Para desenredar la madeja, dividamos el asunto en 3 apartados:
I) TABLÓN DE ANUNCIOS
No tiene sentido que este “Bando” esté colgado en el “Tablón de Anuncios” del Ayuntamiento durante 9 años por el nulo interés para los vecinos, como veremos.
¿No tendrían más interés para este “Tablón de Anuncios” otros temas? Por ejemplo:
1) Saber quién hizo el escudo y la bandera municipal, que, por cierto, el Ayuntamiento no ha pagado un euro.
2) Aclarar la “falacia” de que los alcaldes y concejales de pueblos pequeños no cobran dinero por ejercer sus funciones, si exceptuamos los teléfonos, las tarjetas de crédito, los desplazamientos en coche y las dietas, incluso que sea la misma persona, si pertenece a la corporación municipal, la que contrata un trabajo y la que lo realiza, y, además, lo cobra. Hecha la ley, hecha la trampa.
A) La Ley 7/1985, de 2 de abril, Reguladora de las Bases del Régimen Local, indica en su artículo 46.2 a): “El Pleno celebra sesión ordinaria… cada tres meses en los municipos de hasta 5.000 habitantes”.
B) En el año 2008, por ejemplo, el Ayuntamiento de Villafrechós celebró 8 “sesiones” en 3 meses (de 22 “sesiones” anuales), que duraban en torno a 1 hora, al mediodía. ¿Por qué chirrían tantas sesiones y convendría explicarlas? Muy sencillo: por cada sesión cobraba cada uno de los asistentes 36,00 euros en 2008, como “dieta”, según figura en los datos facilitados por el Ayuntamiento.
II) LIBRO
Características técnicas
Libro de 432 páginas, con un formato de 17 x 24 centímetros. Impreso a 4/4 colores en papel interior estucado brillo de 150 gramos; papel de cubierta, impresa a 4/0, en un estucado brillo de 350 gramos. Cubierta con solapa plastificada. Cosido a hilo.
Tirada: 1.023 ejemplares (comprados por el Ayuntamiento de Villafrechós: 559 ejemplares; comprados por la Diputación: 273 ejemplares; comprados por el propio autor: 191 ejemplares), que supuso un coste de 9.002,40 € (sin IVA) o 9.360,45 € (con IVA).
–Coste de autor: 0.
–Coste de editor: 0.
–Coste de imprenta:
1) Factura imprenta al Ayuntamiento (22/11/2012): 1.398,62 € (sin IVA) o 1.454,56 € (con IVA).
2) Factura imprenta al Ayuntamiento (24/11/2012): 3.520,58 € (sin IVA) o 3.661,40 € (con IVA).
3) El Ayuntamiento recibió a cambio de esos pagos: 559 ejemplares del libro “Atar cabos en Villafrechós”, o sea, cada libro le costó al Ayuntamiento 8,8 € (sin IVA) o 9,15 € (con IVA).
–El Ayuntamiento vendió cada ejemplar del libro: 10 €.
¿Dónde está el problema? Nadie obligó al Ayuntamiento de Villafrechós a comprar ejemplares del libro “Atar cabos en Villafrechós” (y menos todavía le obligó a participar en el refresco), prueba de ello es que el Ayuntamiento no compró ejemplares del libro “Las calles de Villafrechós”, y este libro se publicó y el autor decidió venderlo al precio de coste de imprenta (2,00 euros) en los distintos establecimientos de la villa, que colaboraron gustosamente.
Sin embargo, el Ayuntamiento en el libro “Atar cabos en Villafrechós”, como se ve, optó por venderlo a un precio superior al coste de imprenta.
¿Acaso desconoce ese “malintencionado bando” del “Tablón de Anuncios” que entre Vicente Cuadrillero y yo hicimos el libro “Las fiestas de Villafrechós”, lo publicamos, pagamos a pachas el coste de imprenta y se lo regalamos a la Cofradía de Nuestra Señora de Cabo para que pudiera arreglar algunos desperfectos de la ermita con lo que obtuviera de la venta del libro?
Con el escaso interés mostrado por la “historia de Villafrechós”, ¿cómo se le puede ocurrir al regidor de la villa decir que “siempre hemos estado buscando documentos del monasterio (Convento) y del pueblo en general” (“El Norte de Castilla”, 16/2/2014) para justificar la pretensión de hacer un viaje a Jerusalén en busca de fotocopias de documentos que están en el Archivo Histórico Nacional de Madrid, que sin duda es el mismo motivo esgrimido para ir a Estados Unidos a “mostrarle a Jeff Bezos un libro homenaje por los 25 años de Amazon, que pesa más de 100 kilos”? Para realizar dichos viajes a costa del erario público.
III) Refresco presentación del libro
El concepto que se esconde detrás de los 998,25 € corresponde a una factura ilegal o falsa.
Cuando se tomó la decisión de presentar el libro “Atar cabos en Villafrechós” en Villafrechós, la Confitería CUBERO de Valladolid dijo al autor del libro que el refresco que se ofreciera tras la presentación querrían darlo ellos, o sea, corría de su cuenta. Y le pidieron que simplemente les indicara cuántas personas podrían asistir, para aumentarlo en un 15%, y si tendrían que llevar ellos cubiertos de plástico. El autor se lo preguntó al alcalde en una ocasión que coincidió con él en Valladolid, y este insistió en que le presentara a los de la Confitería CUBERO, que no conocía. Así lo hizo en la Confitería CUBERO de la calle Pasión de Valladolid. Allí surgió la idea de que el Ayuntamiento querría participar en este refresco, idea a la que se oponían, inicialmente, los de la Confitería CUBERO, y sólo, tras una intervención del autor a favor de que se le permitiera al Ayuntamiento una mínima participación en el refresco, cedieron los de la Confitería CUBERO de Valladolid en sus intenciones iniciales.
No termina aquí todo este embrollo. Don Antonio Concejo Sáinz y el “Concejo Hospedería” de Valoria la Buena ofrecieron al autor, y así lo hicieron, que el vino del cacareado refresco corría de su cuenta, y mandaron 5 cajas de vino para el evento: 3 de vino tinto y 2 de vino dulce. Sobraron más de 3 cajas de vino, que fueron despachadas en días posteriores en el bar del hermano del alcalde, la persona o entidad que está detrás de la factura de marras, sin consultar ni solicitar permiso a su verdadero dueño, al que se lo habían regalado.
La factura que está detrás de los 998,25 € llama la atención, en primer lugar, por la cantidad: algo más de 998 € y algo menos de 1.000 €. Y ya saben todos por qué. Se conoce de sobra el caso de Laura Borràs, presidenta del Parlament de Cataluña.
Además, en esas fechas llegaron comunicaciones de HACIENDA a dos asociaciones sin ánimo de lucro de Villafrechós, en las que les advertían que, si tenían que hacer ingresos a la empresa que está detrás de esa factura, debían hacerlo en la Cuenta de Hacienda, ya que dicha empresa llevaba varios años sin estar al corriente de los pagos con HACIENDA, situación que la convertía automáticamente en una empresa que no puede facturar con la administración pública por “no estar al corriente de los pagos con Hacienda y la Seguridad Social”.