Es verdad que los ayuntamientos donde vivieron tanto Benedicto Santos López (Don Bene), Oviedo, como Enrique Cubero Román, Valladolid, les han dedicado una calle en señal de agradecimiento, para que los vecinos se acuerden de ellos, aunque en la localidad donde nacieron no haya ni siquiera el umbral de una puerta que recuerde que esos nacieron allí. Y resulta más extraño todavía que ese mismo ayuntamiento se afane por hacer hijo predilecto al creador de Amazon -de padres y abuelos americanos- simplemente porque ese pueblo vio nacer al padre de quien le adoptó. ¡Qué habrá hecho ese hombre -aparte de tener mucho dinero- por la villa que quiere hacerle “hijo predilecto”! ¿No quedaron escarmentados los vecinos con la experiencia del Dr. Antonio Vallejo-Nájera?