PASANDO POR ZARATÁN
Pasando por Zaratán
en una noche encantada,
recordamos un refrán
de aquella tierra labrada.
Eran las tres de la noche
La Luna a pleno brillaba,
nadie quiso poner broche
si Villanubla esperaba.
Eran las tres de la noche
en aquella madrugada,
sin querer hacer derroche
no fue marcha marginada.
Pasamos por Zaratán
entre brisas que gustaban,
nadie quiso ser patán
en fechas que calentaban.
En La Castilla sedienta
entre luces que temblaban,
en Zaratán no se inventa
cuando las noches bailaban.
El firmamento brillando
al ver venir la alborada,
Zaratán nos fue enseñando
su ladera bien cuidada.
Cuando miramos al cielo
entre luces que adornaban,
sentimos el gran consuelo
de unas tierras que clamaban.
Zaratán marca caminos
en las serias madrugadas,
que te parecen divinos
entre brisas bien llevadas.
Zaratán siempre es camino
sin hablar de las pisadas,
algún sufrido adivino
dejo sus huellas marcadas.
G X Cantalapiedra.
Pasando por Zaratán
en una noche encantada,
recordamos un refrán
de aquella tierra labrada.
Eran las tres de la noche
La Luna a pleno brillaba,
nadie quiso poner broche
si Villanubla esperaba.
Eran las tres de la noche
en aquella madrugada,
sin querer hacer derroche
no fue marcha marginada.
Pasamos por Zaratán
entre brisas que gustaban,
nadie quiso ser patán
en fechas que calentaban.
En La Castilla sedienta
entre luces que temblaban,
en Zaratán no se inventa
cuando las noches bailaban.
El firmamento brillando
al ver venir la alborada,
Zaratán nos fue enseñando
su ladera bien cuidada.
Cuando miramos al cielo
entre luces que adornaban,
sentimos el gran consuelo
de unas tierras que clamaban.
Zaratán marca caminos
en las serias madrugadas,
que te parecen divinos
entre brisas bien llevadas.
Zaratán siempre es camino
sin hablar de las pisadas,
algún sufrido adivino
dejo sus huellas marcadas.
G X Cantalapiedra.