El agua del grifo de Arcenillas, declarada no apta para el consumo humano
La incidencia podría deberse a la puesta en funcionamiento de un nuevo pozo de sondeo l El Ayuntamiento estudia abrir dos manantiales cerrados
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Vecinos de Entrala se abastecen de agua de un camión cisterna el otoño pasado.
Foto S. Ramos
S. RAMOS
Vecinos de Arcenillas han mostrado su malestar por la ausencia de agua potable que hay en el pueblo desde el pasado día 25, cuando una analítica realizada por la empresa que lleva el control en la comarca avisó de que el agua del grifo no es apta para el consumo. Los vecinos han recibido una carta del Ayuntamiento donde se da cuenta de esta incidencia, que en principio podría deberse a la puesta en funcionamiento en septiembre del pozo de sondeo ubicado entre Pontejos y Casaseca de las Chanas. «Si la próxima analítica nos sigue condicionando el consumo de agua potable para beber se cerrará este pozo, que tiene una capacidad de 24.000 litros por hora y habilitaremos los otros, que se habían cerrado porque no tenían suficiente caudal debido a la sequía que arrastramos», indicó el alcalde, Natalio Gutiérrez.
El regidor explica que la recomendación de las autoridades sanitarias de la Junta es que el agua no se beba, aunque sí se puede utilizar para otros usos, como cocinar o la ducha. El aviso, por parte del Ayuntamiento a la Diputación Provincial, ya que se habían producido ayer a mediodía y para hoy a más tardar esperan la llegada de un camión cisterna para abastecer los vecinos de Arcenillas de agua potable.
Gutiérrez asegura desconocer exactamente el compuesto hallado en el agua y que compromete su potabilidad. «Creo que es floruro, pero no lo se a ciencia cierta, hasta que no nos lleguen oficialmente los resultados de los análisis».
Arcenillas es el tercer pueblo de la comarca sin agua potable y se suma a San Marcial y El Perdigón. En el primer caso la contaminación por nitratos está en proceso de resolución con la construcción de un nuevo pozo de sondeo, aunque los vecinos llevan tres años suministrándose con camiones cisterna. A San Marcial se sumó posteriormente Entrala, con el mismo problema de nitratos, sin que de momento se conozca si se está arbitrando alguna solución. Ahora se suma Arcenillas, si bien el alcalde indica que existe la posibilidad de reabrir sondeos alternativos si subsiste el problema en el principal.
La incidencia podría deberse a la puesta en funcionamiento de un nuevo pozo de sondeo l El Ayuntamiento estudia abrir dos manantiales cerrados
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Vecinos de Entrala se abastecen de agua de un camión cisterna el otoño pasado.
Foto S. Ramos
S. RAMOS
Vecinos de Arcenillas han mostrado su malestar por la ausencia de agua potable que hay en el pueblo desde el pasado día 25, cuando una analítica realizada por la empresa que lleva el control en la comarca avisó de que el agua del grifo no es apta para el consumo. Los vecinos han recibido una carta del Ayuntamiento donde se da cuenta de esta incidencia, que en principio podría deberse a la puesta en funcionamiento en septiembre del pozo de sondeo ubicado entre Pontejos y Casaseca de las Chanas. «Si la próxima analítica nos sigue condicionando el consumo de agua potable para beber se cerrará este pozo, que tiene una capacidad de 24.000 litros por hora y habilitaremos los otros, que se habían cerrado porque no tenían suficiente caudal debido a la sequía que arrastramos», indicó el alcalde, Natalio Gutiérrez.
El regidor explica que la recomendación de las autoridades sanitarias de la Junta es que el agua no se beba, aunque sí se puede utilizar para otros usos, como cocinar o la ducha. El aviso, por parte del Ayuntamiento a la Diputación Provincial, ya que se habían producido ayer a mediodía y para hoy a más tardar esperan la llegada de un camión cisterna para abastecer los vecinos de Arcenillas de agua potable.
Gutiérrez asegura desconocer exactamente el compuesto hallado en el agua y que compromete su potabilidad. «Creo que es floruro, pero no lo se a ciencia cierta, hasta que no nos lleguen oficialmente los resultados de los análisis».
Arcenillas es el tercer pueblo de la comarca sin agua potable y se suma a San Marcial y El Perdigón. En el primer caso la contaminación por nitratos está en proceso de resolución con la construcción de un nuevo pozo de sondeo, aunque los vecinos llevan tres años suministrándose con camiones cisterna. A San Marcial se sumó posteriormente Entrala, con el mismo problema de nitratos, sin que de momento se conozca si se está arbitrando alguna solución. Ahora se suma Arcenillas, si bien el alcalde indica que existe la posibilidad de reabrir sondeos alternativos si subsiste el problema en el principal.