Iniciada en
piedra de sillería en el año 1182, fue terminada muchos años después utilizando ya el ladrillo como elemento constructivo. Es de estilo
románico y su planta tiene tres naves con un crucero no acusado y tres
ábsides semicirculares en la cabecera, El templo conserva tres
portadas entre las que destaca por su amplio desarrollo iconográfico, la situada al mediodía con el tema de la Epifanía.