Todos estaban contentos, tenian sus
huertas sembradas y crecidas. Antes de ayer, por la
noche, vino una
helada que lo arrasó todo. Y, ¡otra vez a empezar!...
Esto me recuerda un relato que leí hace ya mucho tiempo. Los labriegos hartos ya,, de las inclemencias del tiempo hicieron un pacto con algún dios de la mitologia ¿El diós CRONO-SATURNO, dios de las cosechas?. Cuando ellos pidieran
agua les mandaría agua y cuando pidieran sol les mandaria sol. Al final no recogieron nada y se volvieron contra
... (ver texto completo)