María, siento mucho que te nos hayas ido... yo siempre te tendré en mi recuerdo, y espero que cuando a mí me llamen, también, seas uno de esas personas, amigas o familiares, que dicen vienen a nuestro encuentro para acompañarnos a esa otra dimensión, o " Más Allá". Seguro que tú con tu amabilidad y tu sonrisa nos harás el transito más agradable. De todas formas, de momento no tenemos ninguna prisa en hacer ese camino, hasta llegar a tu edad, 96 o 97, nos queda camino por recorrer. Espero que en el otro lado, te hayan dado un lugar bonito y acogedor, como tu te mereces, y sin tantos ires y devenires...
Con todo mí cariño.
Con todo mí cariño.