Viernes de pasión para los católicos, para los ateos un festivo más en el calendario.
Para todos éste año se ha convertido en un viernes de pasión, pasión por "vivir" aunque sea disfrutando del arresto domiciliario que nos ha tocado en suerte.

Buenas mediodías!

Las aguas volverán a su cauce y nosotros volveremos a la "vida normal" y prefiero pensar que entonces cuando eso ocurra, todo será mejor que antes.

Para terminar por hoy, me quedo con éste refrán, "de abril a abril, vuelven las aguas por donde solían ir"

Y en esas estamos ahora, en la semana de pasión donde el dolor, la pasión y el vía crucis han cambiado las calles por los hospitales.

La tierra baldía se divide en cinco bloques: El entierro de los muertos, es el que comienza, con éste verso.

Pero que eres el mes más cruel lo sabemos porque TS. Eliot poeta del siglo XX, lo escribió en su libro la Tierra Baldía.

Y llegó abril!
Sabíamos por el refranero que siempre fuiste vil, traicionero y ruin, al entrar o al salir, o al medio por no mentir.

Cómo decía Aute, " si yo sólo pasaba, pasaba por aquí"

Ahora estamos en el momento propicio, para revisar convinciones, hábitos y formas de hacer.
Es tiempo de desaprender, de reinventarse y aprender de nuevo.

Será difícil borrar de la memoria lo vivido: sin besos, sin abrazos, a un metro de distancia y sin derecho a roce.
A brillar sin joyas, sin maquillaje, a lucir sin adornos, desnudos de objetos superfluos.

Cuando todo ésto pase, cuando volvamos por fin a la bendita normalidad. ¿Habremos aprendido algo?

En el año de Beethoven, él seguro que habría dicho: "Así no".

El desfile de los pasos de la semana santa, los vemos todos los días los trabajadores sanitarios por los pasillos, cuando ingresa alguna persona que ha dado positivo o cuando por desgracia fallece.

Y es que ahora el overbooking está en los hospitales.