Compramos energía a futuro

CASTROVERDE DE CAMPOS: VALLADOLID Delicias terracampinas El cocinero Cecilio...

VALLADOLID
Delicias terracampinas
El cocinero Cecilio Lera rinde homenaje a Tierra de Campos a través de su gastronomía.

Han pasado diez años desde la última vez que Cecilio Lera Blanco rindiera homenaje a Tierra de Campos a través de sus productos y su gastronomía, al menos de forma oficial, porque en el día a día no deja de hacerlo desde hace dos décadas. Castroverde de Campos se vuelve a convertir durante cinco días en el epicentro de la comarca terracampina para aglutinar como una piña las tradiciones culinarias de sus pueblos, sean de Valladolid, Zamora o León.

El Mesón del Labrador dio ayer una nueva muestra de lo que se avecina hasta el domingo, 26 de febrero, las terceras Jornadas de la Cocina Ancestral de Tierra de Campos. El cocinero leonés Carlos Cidón, propietario del restaurante Vivaldi, visitó por la mañana a su amigo en Castroverde.

Tampoco quisieron esperar al fin de semana para probar sus albóndigas caseras y las manitas de lechazo el pontevedrés José Luis de'Ocampo, la cordobesa afincada en Salamanca Modes Bello y Jaime Carvajo, de Industrias Carvajo. José Vara y Tomás Casado, que ha creado numerosos puestos de trabajo en Valdescorriel. Los vallisoletanos Eugenio álvarez y Esteban Castro saboreaban unos deliciosos pichones en compañía de Octaviano Rodríguez y Carlos Castro Bayón.

José Ramón álvarez, de la empresa asturiana Reny Picot, compartía mesa con los industriales zamoranos José Cobreros y Manuel Viaño. Mientras que en otra, los palentinos Félix Escobar, Pepín Rico (pintor), Miguel Díez y Pedro González (premio de comercio de la Junta de Castilla y León) degustaban las orejas y flores de Carnaval, el mejor postre posible para cerrar una comida terracampina.

Eladio Rodríguez, Julián Palmero, Tello Alegre y Julio Cachán comían esos ricos pichones que se crían en los palomares que han rescatado del olvido, junto al chacinero Tinín Cañíbano.

Entre la paloma zurita estilo Bolaños y el marranín asado de Palazuelo, se ha colado en la carta la sopa de boda de la señora Marciana. Todo ello es posible gracias también a la mujer del mesonero, Minica Collantes, a sus colaboradores Ana Casquete, Marí Cruz Baza y Javier Tachín, y al sumiller Ramón Blas González. Aunque su hijo Luis Alberto se ocupa ahora de su restaurante en Toro, del que no hay más que alabanzas, ayer ayudaba a sus padres.

Cecilio, además de beber de la sabiduría culinaria de Tierra de Campos, no olvida los toques de modernidad en el 'micuit' trufado acompañado de mermeladas o en esos huevos con crema de boletus y ralladuras de trufa.

Noticia del Norte de Castilla.

Un saludo
Salva.