PÀGINA.--2ª. Siglo XVIEl auge que la economía de Medina de Rioseco iba alcanzando llegó a su máximo apogeo durante el siglo xvi. Se construyen los cuatro mayores templos riosecanos, salen hacia América numerosos habitantes que dejan cuantiosos donativos y herencias a la ciudad y sus parroquias. Asimismo el municipio se convierte en el centro de distribución mundial de la plata llegada desde las Indias, a través del puerto de Sevilla y pasa a ser sede de las ferias más importantes del reino, tras las de Medina del Campo. Es el momento en que nacen las cofradías penitenciales, que elevan sus capillas, hospitales, corrales de comedias y comienzan sus procesiones de penitencia y pasión. Guerra de las ComunidadesFue sitiada por las tropas de don Pedro Girón y sede de los regentes del reino, Fadrique Enríquez, Adriano de Utrech e Íñigo de Velasco, que tuvieron que refugiarse en su castillo (aunque no hay referencias históricas fehacientes de la existencia de tal castillo). Cuentan las leyendas que la situación se resolvió por la vía del entendimiento, gracias a la mediación de la condesa de Mòdica, esposa del almirante don Fadrique II. Por haber apoyado la causa realista, el emperador Carlos V concedió interesantes privilegios al municipio y el título de Duque de Medina de Rioseco, con Grandeza de España, al hermano de Fadrique II, Fernando Enríquez, heredero del título de almirante de Castilla. Le sucedió Luis Enríquez, sexto almirante y a este Luis II Enríquez. Guerra de SucesiónDurante el señorío de Juan Alfonso Enríquez de Cabrera, noveno almirante, Felipe IV concedió a Rioseco el título de ciudad en 1632. Juan Gaspar Enríquez de Cabrera fue el décimo almirante y Juan Tomás Enríquez de Cabrera fue el undécimo y último. A la muerte de Carlos II, durante la Guerra de Sucesión se declaró en contra de Felipe V el cual suprimió el Almirantazgo y en 1725 en que habiendo muerto este, los títulos confiscados, bienes y herencia de los Enríquez de Cabrera, pasaron a su sobrino Pascual Enríquez de Cabrera, excepto el de almirante. Falleció en 1739 y se mantuvo en la familia únicamente la sucesión ducal, hasta el año 1797, en que, muerto el poseedor, revirtió a la Corona. Posteriormente el ducado de pasó a los Osuna. Siglo XVIIIEs un momento de apogeo económico, por las novedades introducidas en las explotaciones agrícolas por los ilustrados. En Medina de Rioseco se funda una Sociedad Económica de Amigos del País y se construye un cuartel de caballería, junto al Arco de Ajújar, a expensas de la ciudad. Se realizan plantaciones de árboles y comienza la construcción y mejora de caminos y fuentes. Siglo XIXA comienzos del siglo xix se escribieron en Medina de Rioseco las páginas de unos hechos que habían de tener gran repercusión sobre la suerte que correría el resto de España durante la guerra de la Independencia, la batalla del Moclín. Un poderoso ejército francés dirigido por el mariscal Jean-Baptiste Bessières se enfrentó en las inmediaciones de Medina de Rioseco, el 14 de julio de 1808, a los ejércitos españoles de Castilla y de Galicia dirigidos por los generales Cuesta y Blake. La batalla de Rioseco fue la primera de importancia en la Guerra de la Independencia, concluyó con una terrible derrota para las tropas españolas y supuso la llave que abrió la puerta al trono español a José Bonaparte. En palabras del propio emperador Napoleón: «la batalla de Rioseco es la segunda batalla de Villaviciosa, ha puesto en el trono de España a mi hermano José». El triunfo del mariscal Bessières le valió para que el emperador Bonaparte le concediera la condecoración del Toisón de Oro. En el siglo xviii, se había construido el canal de Castilla uno de cuyos ramales, el llamado Canal de Campos llegó hasta la ciudad de Rioseco en 1849. Como consecuencia se instalaron gran cantidad de fábricas de harina, molinos de papel, y fundiciones siderúrgicas. A la actividad generada por su construcción hay que añadir los beneficios que reportó como sistema de transporte y regadío y que se convertían en la principal fuente de ingresos, desplazando a la tradicional actividad comercial. El desarrollo del ferrocarril vendría a sustituir el uso del canal. El que pasaba por Medina de Rioseco, era el popularmente conocido como «Tren Burra», debido a la escasa velocidad de desplazamiento. La compañía que explotaba estas líneas, que unían Valladolid con Palanquin os y con Villada, era la Compañía de Ferrocarriles Secundarios de Castilla, fusión de otras como la Compañía del Ferrocarril Económico de Valladolid a Medina de Rioseco. Como curiosidad hay que decir que su inauguración fue adelantada en unos meses, por el anuncio de la actuación del torero Frascuelo en las ferias septembrinas de Rioseco. NAZARIO MATOS..