TIERRA DE CAMPOS. PÀGINA..6ªIndependencia de Portugal
El rey Alfonso VIII de Castilla que en un rápido avance hasta las playas del sur, desafía a toda la tropa mora en las playas de ALGECIRAS, sin esperar la llegada de los refuerzos que acuden desde el norte ataca inoportunamente perdiendo en la batalla de Alarcos, haciendo que se desestabilizara por completo al Reino de Castilla y frenara todo intento de reconquista. Las tropas asaltantes lograron devastar la provincia hasta lograr llegar hasta tierras de ALBA DE ALISTE Y CASTROGONZALO. La situación se mantuvo hasta que en 1212 se presenta batalla en NAVAS DE TOLOSA que abre paso a los reinos cristianos al sur de la península. ZAMORA, TORO Y BENAVENTE habían aumentado de población y crecía su protagonismo en forma de juntas de gobierno, construcciones de ejércitos, cortes, etc. De la misma forma aumentó el número de edificios institucionales y religiosos. En 1219 Domingo de Guzmán se instala en ZAMORA Y TORO extendiendo la Orden de Predicadores (Dominicos) por las tierras zamoranas. El Alfonso IX de León concede a las huestes zamoranas la posibilidad de incluir el puente romano de Mérida junto al brazo de Viriato en el escudo zamorano debido a su participación en la batalla contra Aben-fuit. Dicha gesta y la cesión del monarca castellano se encuentra en una lápida de la Puerta de Olivares. En 1230 firma Alfonso IX la Concordia de BENAVENTE. Su sucesor Fernando III se corona en la ciudad de TORO, estando en ÁVILA en 1232 confirma los antiguos privilegios concedidos a la ciudad de Toro. Al igual que fue favorecida por Sancho IV de Castilla (sucesor de Alfonso X el Sabio). El primer historiador zamorano, Juan Gil de Zamora, amigo personal de Alfonso X y preceptor de Sancho IV, escribirá dos libros exaltando las glorias de ZAMORA; al primero lo titula: «Liber de praeconiis civitatis Numantiae» y, al segundo, «Thesis nodosa an ZAMORA sit NUMANTIA». En esta época se crea en ZAMORA la Real Cofradía de Caballeros Cubicularios de ZAMORA encargados de custodiar el cuerpo de los Santos: San Atilano y San Ildefonso. Siendo que la región dejaba de ser frontera de los reinos del AL ANDALUS, pronto sería paulatinamente frontera de otro reino cristiano: el Reino de Portugal. La conferencia de paz entre el rey Alfonso VII de León y Castilla y su primo Afonso Henriques, rey de Portugal. Como resultado, el 5 de octubre de 1143 fue reconocida la independencia del nuevo reino, que quedó reflejada en el Tratado de ZAMORA, que marca de manera oficial el nacimiento de PORTUGAL como estado independiente. Alfonso VII reconoció como monarca a Afonso Henriques por su deseo de ser emperador y necesitar, por tanto, reyes que fueran sus vasallos, aunque una vez logrado el reconocimiento, el portugués siguió una línea de completa autonomía. Se establece la denominada RAYA DE PORTUGAL, del que la provincia de ZAMORA posee una cierta sección. Durante esta época la región fue residencia de los caballeros templarios. Una de las primeras casas de la orden en San Salvador de TORO, extendiéndose posteriormente la orden a ambos lados de la reciente frontera con PORTUGAL. Se produce en 1158 el Motín de la Trucha que se traduce en una revuelta popular urbana acaecida ese mismo año. La rebelión urbana es iniciada en el mercado de la villa por un zapatero y desear comprar una trucha a un despensero denominado Gómez Álvarez de Vizcaya, que intentó dar preferencia a un Noble Castellano en la compra, dicha injusticia causó una rebelión en la que murieron un número indeterminado de nobles de la ciudad. No existen crónicas objetivas y coetáneas que la describan. El caballero Ponce Giraldo de Cabrera que tanto poder hubo adquirido durante el reinado de Alfonso VII y que es denominado PRÌNCIPE DE ZAMORA muere en 1169.
Se abre un periodo conflictivo entre los nobles de Castilla que finalizará en el año 1479. En este periodo muchas ciudades de la provincia se encontraban des gobernadas y llenas de bandos, luchando los unos contra los otros. Durante el estallido de la primera Guerra Civil Castellana entre los partidarios del rey Pedro I (pedristas) y los de Enrique II de Castilla (enriquistas). El comienzo se produce en un concilio que se celebra en el año 1354 en la localidad de Tejadillo, pueblo cercano a TORO, en el que Pedro I instiga a nobles aragoneses. Enrique II logra sofocar este primer intento gracias a la rápida intervención de un ejército armado en BURGOS. El resultado final de la guerra, decidido en la batalla de Montiel, resultó favorable a Enrique II de Castilla que fue declarado rey, y la dinastía Trastámara se instaura en Castilla. En este periodo nace en ZAMORA, Juan de Mella que llegó a ocupar altos cargos en Roma y en la actualidad posee capilla en la catedral denominada "del Cardenal". Durante el reinado de Enrique IV de Castilla se producen actos contra los judíos que habitan en las ciudades zamoranas. Una de las mayores aljamas de la zona cristiana se encontraba en ZAMORA. De la misma forma los nobles zamoranos mostraban desarreglo con el rey Enrique IV y era frecuente que hubiese motines y algarabías en ZAMORA, TORO o BBENAVENTE. Siendo rey Fernando IV de Castilla, que en 1302 contraería matrimonio con la infanta Constanza de Portugal, hija del rey Dionisio I de Portugal, se firmó el tratado de Alcañices como un acuerdo bilateral suscrito en 1297 entre el reino de Castilla y el reino de Portugal y firmado por el rey Fernando IV "El Emplazado", en cuyo nombre, por ser menor de edad, actuaba la reina María de Molina, y por el rey Dionisio I de Portugal. Fue rubricado el día 12 de septiembre de 1297 en el municipio zamorano que le da nombre (en la localidad alistana de ALCAÑICES), dando lugar a una de las fronteras más antiguas de Europa. El duque de Lancaster, pretendiente de la Corona de Castilla con la ayuda del Pedro Alfonso, Maestre de la Orden de Avis que penetran en territorios de Aliste. Bajo las órdenes de Ponce de León las tropas zamoranas con el estandarte de la seña bermeja participaron en la batalla del Salado. Las tropas zamoranas participaron igualmente en el SITIO DE GIBRALTAR. En la crónica rimada de Alfonso XI se comienza a ver las desavenencias del rey con los nobles zamoranos en la ciudad de TORO... NAZARIO MATOS..
El rey Alfonso VIII de Castilla que en un rápido avance hasta las playas del sur, desafía a toda la tropa mora en las playas de ALGECIRAS, sin esperar la llegada de los refuerzos que acuden desde el norte ataca inoportunamente perdiendo en la batalla de Alarcos, haciendo que se desestabilizara por completo al Reino de Castilla y frenara todo intento de reconquista. Las tropas asaltantes lograron devastar la provincia hasta lograr llegar hasta tierras de ALBA DE ALISTE Y CASTROGONZALO. La situación se mantuvo hasta que en 1212 se presenta batalla en NAVAS DE TOLOSA que abre paso a los reinos cristianos al sur de la península. ZAMORA, TORO Y BENAVENTE habían aumentado de población y crecía su protagonismo en forma de juntas de gobierno, construcciones de ejércitos, cortes, etc. De la misma forma aumentó el número de edificios institucionales y religiosos. En 1219 Domingo de Guzmán se instala en ZAMORA Y TORO extendiendo la Orden de Predicadores (Dominicos) por las tierras zamoranas. El Alfonso IX de León concede a las huestes zamoranas la posibilidad de incluir el puente romano de Mérida junto al brazo de Viriato en el escudo zamorano debido a su participación en la batalla contra Aben-fuit. Dicha gesta y la cesión del monarca castellano se encuentra en una lápida de la Puerta de Olivares. En 1230 firma Alfonso IX la Concordia de BENAVENTE. Su sucesor Fernando III se corona en la ciudad de TORO, estando en ÁVILA en 1232 confirma los antiguos privilegios concedidos a la ciudad de Toro. Al igual que fue favorecida por Sancho IV de Castilla (sucesor de Alfonso X el Sabio). El primer historiador zamorano, Juan Gil de Zamora, amigo personal de Alfonso X y preceptor de Sancho IV, escribirá dos libros exaltando las glorias de ZAMORA; al primero lo titula: «Liber de praeconiis civitatis Numantiae» y, al segundo, «Thesis nodosa an ZAMORA sit NUMANTIA». En esta época se crea en ZAMORA la Real Cofradía de Caballeros Cubicularios de ZAMORA encargados de custodiar el cuerpo de los Santos: San Atilano y San Ildefonso. Siendo que la región dejaba de ser frontera de los reinos del AL ANDALUS, pronto sería paulatinamente frontera de otro reino cristiano: el Reino de Portugal. La conferencia de paz entre el rey Alfonso VII de León y Castilla y su primo Afonso Henriques, rey de Portugal. Como resultado, el 5 de octubre de 1143 fue reconocida la independencia del nuevo reino, que quedó reflejada en el Tratado de ZAMORA, que marca de manera oficial el nacimiento de PORTUGAL como estado independiente. Alfonso VII reconoció como monarca a Afonso Henriques por su deseo de ser emperador y necesitar, por tanto, reyes que fueran sus vasallos, aunque una vez logrado el reconocimiento, el portugués siguió una línea de completa autonomía. Se establece la denominada RAYA DE PORTUGAL, del que la provincia de ZAMORA posee una cierta sección. Durante esta época la región fue residencia de los caballeros templarios. Una de las primeras casas de la orden en San Salvador de TORO, extendiéndose posteriormente la orden a ambos lados de la reciente frontera con PORTUGAL. Se produce en 1158 el Motín de la Trucha que se traduce en una revuelta popular urbana acaecida ese mismo año. La rebelión urbana es iniciada en el mercado de la villa por un zapatero y desear comprar una trucha a un despensero denominado Gómez Álvarez de Vizcaya, que intentó dar preferencia a un Noble Castellano en la compra, dicha injusticia causó una rebelión en la que murieron un número indeterminado de nobles de la ciudad. No existen crónicas objetivas y coetáneas que la describan. El caballero Ponce Giraldo de Cabrera que tanto poder hubo adquirido durante el reinado de Alfonso VII y que es denominado PRÌNCIPE DE ZAMORA muere en 1169.
Se abre un periodo conflictivo entre los nobles de Castilla que finalizará en el año 1479. En este periodo muchas ciudades de la provincia se encontraban des gobernadas y llenas de bandos, luchando los unos contra los otros. Durante el estallido de la primera Guerra Civil Castellana entre los partidarios del rey Pedro I (pedristas) y los de Enrique II de Castilla (enriquistas). El comienzo se produce en un concilio que se celebra en el año 1354 en la localidad de Tejadillo, pueblo cercano a TORO, en el que Pedro I instiga a nobles aragoneses. Enrique II logra sofocar este primer intento gracias a la rápida intervención de un ejército armado en BURGOS. El resultado final de la guerra, decidido en la batalla de Montiel, resultó favorable a Enrique II de Castilla que fue declarado rey, y la dinastía Trastámara se instaura en Castilla. En este periodo nace en ZAMORA, Juan de Mella que llegó a ocupar altos cargos en Roma y en la actualidad posee capilla en la catedral denominada "del Cardenal". Durante el reinado de Enrique IV de Castilla se producen actos contra los judíos que habitan en las ciudades zamoranas. Una de las mayores aljamas de la zona cristiana se encontraba en ZAMORA. De la misma forma los nobles zamoranos mostraban desarreglo con el rey Enrique IV y era frecuente que hubiese motines y algarabías en ZAMORA, TORO o BBENAVENTE. Siendo rey Fernando IV de Castilla, que en 1302 contraería matrimonio con la infanta Constanza de Portugal, hija del rey Dionisio I de Portugal, se firmó el tratado de Alcañices como un acuerdo bilateral suscrito en 1297 entre el reino de Castilla y el reino de Portugal y firmado por el rey Fernando IV "El Emplazado", en cuyo nombre, por ser menor de edad, actuaba la reina María de Molina, y por el rey Dionisio I de Portugal. Fue rubricado el día 12 de septiembre de 1297 en el municipio zamorano que le da nombre (en la localidad alistana de ALCAÑICES), dando lugar a una de las fronteras más antiguas de Europa. El duque de Lancaster, pretendiente de la Corona de Castilla con la ayuda del Pedro Alfonso, Maestre de la Orden de Avis que penetran en territorios de Aliste. Bajo las órdenes de Ponce de León las tropas zamoranas con el estandarte de la seña bermeja participaron en la batalla del Salado. Las tropas zamoranas participaron igualmente en el SITIO DE GIBRALTAR. En la crónica rimada de Alfonso XI se comienza a ver las desavenencias del rey con los nobles zamoranos en la ciudad de TORO... NAZARIO MATOS..